ASAJA-Cádiz se ha dirigido a todos ayuntamientos y la Diputación de Cádiz para instarles a respaldar -mediante una moción en sus respectivos plenos- las reformas que el sector agrario andaluz en su integridad (ASAJA, COAG, UPA y Cooperativas Agro-alimentarias) solicitó el pasado 21 de febrero con la firma, junto con la Consejería de Agricultura.

Este documento de alegaciones permitiría, si el Ministerio de Agricultura lo estima, mitigar los daños que está provocando la reforma y que en el caso de Cádiz afectan a absolutamente todos los sectores y cultivos. Tal y como el sector agrario andaluz venía denunciando, Andalucía es la comunidad autónoma más perjudicada por la nueva PAC. “Los datos del propio Ministerio de Agricultura lo confirman”, explica el presidente de ASAJA Cádiz, Pedro Gallardo.

La petición a ayuntamientos y la Diputación de Cádiz se basa en que en este mes de marzo se han publicado en la web del Fondo Español de Garantía Agraria (Fega) los importes de los nuevos derechos provisionales de los agricultores y ganaderos, y” es ahí donde se puede comprobar las pérdidas por explotación, que se sitúan en una horquilla de entre el 20 y el 40 por ciento”; por lo que en el nuevo periodo PAC 2023-2027 los agricultores y ganaderos andaluces “pierden 500 millones de euros”.

DEMANDAN MEDIDAS DE FLEXIBILIZACIÓN, EL REDISEÑO DE LAS REGIONES, Y LA INCLUSIÓN DE UNA BATERÍA MÁS AMPLIA DE CRITERIOS EN LOS ECO-REGÍMENES

El Plan Estratégico de la PAC (Pepac) que el Ministerio de Agricultura presentó en Bruselas en 2022 tiene ahora “una oportunidad para ser enmendada y mejorada”, puesto que el nuevo marco normativo “permite que los estados miembros de la UE puedan presentar modificaciones al Pepac una vez al año”.

De ahí que el sector agrario andaluz, a través de ASAJA, COAG y UPA y Cooperativas Agro-alimentarias, haya consensuado el documento de alegaciones “con las modificaciones que el MAPA debe introducir y comunicar a Bruselas si de verdad quiere evitar mayores perjuicios al campo andaluz”, señala Gallardo.

En las alegaciones se demandan medidas de flexibilización en la nueva PAC, el rediseño de las regiones, especialmente de aquellas que han quedado encuadradas de manera artificial fuera de su sistema agronómico natural; la inclusión de una batería más amplia de criterios en la determinación de los eco-regímenes; que se reconozcan los avances en sostenibilidad de miles de agricultores y ganaderos andaluces que están en producción integrada o en producción ecológica, y que deben ser reconocidos como agricultores activos.

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