La vicepresidenta segunda del Gobierno, Yolanda Díaz, ha planteado a consumidores y distribuidoras de alimentación que pacten una «cesta de la compra básica» con unos 20 o 30 productos con precios máximos establecidos, aunque en ningún momento habla de solventar el problema del sector agrario que, en muchos casos, está vendiendo en origen por debajo de costes.

En declaraciones a los medios este lunes antes de asistir a la toma de posesión del Fiscal General del Estado, Álvaro García Ortiz, Díaz ha asegurado que «la alimentación, la cesta de la compra básica es problema para el país».

La ministra de Trabajo ha anunciado que tiene previsto reunirse, junto al ministro de Consumo, Alberto Garzón, con las asociaciones de consumidores y con las distribuidoras para propiciar ese acuerdo.

Se trataría, ha dicho, de que consumidores y distribuidoras fijen una cesta de la compra básica, algo que sería «absolutamente legal, sin vulnerar el derecho de la competencia», porque, ha asegurado, no se regularía mediante una ley sino que se fijaría con un pacto entre las partes.

En cualquier caso, ha recordado que el Gobierno ya estableció un precio máximo a las mascarillas y a la bombona de butano. «Si ahora el momento no es excepcional, cuándo lo va a ser», ha añadido.

Con el pacto que propone, se garantizaría a los ciudadanos el acceso a estos productos a un precio más bajo, no sólo «porque pierden poder adquisitivo, sino porque tienen dificultades para mantener una alimentación sana».

«La alimentación está siendo un enorme problema para el país, para la ciudadanía y para los pequeños y medianos productores», ha dejado claro la vicepresidenta segunda, que ha detallado cómo los precios de naranjas o patatas aumentan hasta un 800% desde que las vende el agricultor hasta que se compran en el supermercado.

EL PSOE NO RESPALDA LA PROPUESTA, EL PP CRITICA «LA OCURRENCIA» Y PODEMOS E IU QUIEREN UN MAYOR CONTROL DE PRECIOS

Por su parte, la portavoz del PSOE, Pilar Alegría, se ha limitado en una rueda de prensa a decir que los socialistas son «plenamente conscientes» del incremento de los costes de producción provocados por la guerra de Ucrania, así como de los costes de la energía, de los fertilizantes y de los piensos y ha aludido a «los 169 millones de euros destinados a ganaderos lácteos y un segundo reparto a las comunidades autónomas de más de 193 millones destinados a los ganaderos de carne», en su ún9ica referencia al sector agrario.

De igual forma, la propuesta de la vicepresidenta de que la cesta de la compra básica tenga precios máximos establecidos ha sido recibida por el PP como una «ocurrencia» tras la cual no hay «rigor» y ha apuntado que la propuesta de la líder de Sumar «puede sonar bien», pero parece hecha «sin ningún tipo de rigor ni de trabajo detrás».

Podemos e IU sí han aplaudido la idea de la ministra de Trabajo de que los veinte o treinta productos alimentarios más básicos tengan un tope en su precio como escudo ante la inflación, como ya tuvieron las mascarillas sanitarias o la bombona de butano, e incluso hablan de ir más allá, pero sin citar en nada la situación del sector agrario.

×