Las organizaciones agrarias de la provincia de León (COAG, Asaja, UPA y UCCL), reunidas en la Cámara Agraria Provincial, han firmado un documento conjunto en defensa del cultivo del lúpulo. El  objetivo que se persigue es que las administraciones implicadas autoricen productos fitosanitarios para tratar de forma rentable y eficiente las plagas y enfermedades más comunes, evitando cuantiosas pérdidas de cosecha en cantidad y calidad, como ha ocurrido este año por los ataques de oídio a la planta.

Los lupuleros se enfrentan a este problema por tratarse de un cultivo de los denominados “menores”, para los que no hay respuestas rápidas por parte de las multinacionales de los agroquímicos, al no ser tan rentable la puesta en el mercado de productos nuevos que sustituyan a los que se  retiran por ser potencialmente más peligrosos.

Por otra parte, los representantes de los agricultores han hecho un llamamiento a las empresas que comercializan el lúpulo para que revisen al alza los precios de los contratos, compensando los mayores costes, y que se comprometan en su política comercial a medio y largo plazo para dar certidumbre al sector.

Las organizaciones agrarias quedan a disposición del Ministerio de Agricultura y de la Consejería de Agricultura de la Junta de Castilla y León para abordar esta cuestión, y en este sentido han solicitado la creación de un grupo de trabajo técnico que presida el Ministerio por ser en el que recaen las mayores competencias en esta materia.

Cabe recordar que los productores de lúpulo en León, provincia que acumula el mayor porcentaje de la producción total en España, prevén que la producción de esta materia prima descienda un 15% este año debido a la afección del hongo oídio, según ha explicado a Efeagro el vicepresidente de la asociación de Lúpulo de León, Juan José Miguelez, quien ha detallado que la producción de este año está siendo «complicada».

Las condiciones climáticas han propiciado que durante este año el hongo oídio haya afectado con mayor intensidad a las plantaciones, ya que, según ha indicado Miguelez, las temperaturas más bajas en las noches y el calor del día han ayudado a su propagación.

×