La sectorial vitivinícola de APAG Extremadura Asaja se ha reunido para evaluar la situación del sector del vino en la región de cara al inicio de la campaña, tanto en la producción como precios o calidad de la misma. Según las estimaciones que ha ofrecido el presidente de APAG Extremadura Asaja, Juan Metidieri, habrá una bajada en la producción se verá mermada tanto en uva tinta como en blanca. En concreto, respecto a una campaña normal, se espera que la producción de la uva blanca caiga hasta un 35%, mientras que en el caso de la uva tinta llegaría hasta el 45%.

En cuanto a la calidad de los caldos, se prevé que sea «muy buena» porque el estado vegetativo de la planta está haciendo que se favorezca una maduración prolongada, ideal para vinos de mucha calidad. Las noches frescas respecto a los días de calor «están sentando muy bien». Además, está siendo una campaña con una bajada en la producción pero también con escasez de plagas y enfermedades. Respecto al stock, se ha señalado que «casi todo está vendido», sobre todo en uva blanca con un porcentaje que ya se eleva al 93%.

Aunque las ventas vayan bien, en cuanto a cantidad, Metidieri ha recordado que el mal endémico de todas las producciones son los bajos precios. No puede ser, dice Metidieri, «que suba la luz, suba el gasoil y todos los insumos, pero lo que se paga a los agricultores siempre está en caída libre».

También se ha referido el dirigente agrario a otro problema recurrente en la campaña de recolección de la uva, como es la falta de mano de obra. Es irónico, ha dicho Metidieri, que la ministra de Trabajo hable del campo extremeño como precario, pero no se preocupe de contrasentidos como es esa falta de mano de obra en una de las regiones con la tasa de paro más elevada del país.

MALA GESTIÓN DE LAS AYUDAS

Asimismo, desde la Sectorial del Vino de APAG Extremadura Asaja se ha querido incidir en la «nefasta gestión» que está realizando la consejería de Agricultura respecto de las ayudas a la reestructuración y reconversión del viñedo en las últimas campañas, puesto que hay proyectos abiertos del año 2018 con agricultores que no han cobrado todavía esa anualidad. Además, del proyecto de reestructuración y reconversión de 2021, que finalizó el 21 de mayo, «todavía no tenemos ninguna resolución.

En opinión de APAG Extremadura Asaja «se está haciendo una gestión muy oscurantista, puesto que no se ofrecen datos claros sobre las liquidaciones, lo que favorecería una mayor transparencia».

Este tipo de ayudas, se ha concluido, son las únicas del programa PASVE que benefician a los agricultores de Extremadura, por lo que las resoluciones se deberían gestionar con una mayor agilidad y también claridad.

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