Las reacciones ante la suspensión cautelar de la recogida nocturna de la aceituna en Extremadura que se sumaba a la de Andalucía, no se han hecho esperar y desde APAG Asaja Extremadura piden que se derogue,pues supone un lastre para el campo.
El presidente de APAG Extremadura Asaja, Juan Metidieri, ha reclamado la derogación de la resolución de la Dirección General de Sostenibilidad por la que se suspende de manera cautelar la recogida nocturna por medios mecánicos de aceituna en olivares superintensivos por posible daño a aves silvestres.
En su opinión, lo único que hace la política es «limitar y prohibir en el campo», lo que supone «un lastre» para las zonas rurales, ya que «no hay ningún estudio científico que acredite daños a las aves».
El objetivo es compatibilizar las prácticas agrícolas con la conservación de la biodiversidad
La resolución señala que España, y especialmente Extremadura, es lugar de paso de millones de aves migratorias que, procedentes de latitudes más elevadas de Europa, cruzan la península buscando áreas más cálidas donde pasar el invierno.
De igual forma, pone de manifiesto que «se desconoce el potencial impacto ambiental sobre la avifauna derivado de la recolección con máquinas cabalgantes durante la noche en el olivar en seto».
Por ello, con el fin de compatibilizar las prácticas agrícolas con la conservación de la biodiversidad, y teniendo en cuenta la «preocupación» que ha manifestado la Comisión Europea al respecto, por parte de la Administración ambiental «se considera conveniente tomar medidas preventivas».
Estas medidas ya se habrían propuesto en Andalucía a principios de octubre tras una consulta con las organizaciones agrarias – entre las que también está Asaja – y llegar a un consenso.
En este caso, un informe de la Junta de Andalucía había elaborado un informe de impacto en el revelaba que la recogida nocturna de la aceituna podía provocar la muerte de 2.600.000 aves
La noche se hizo para dormir y dejar dormir.