El ministro de Agricultura, Alimentación y Pesca español, Luis Planas, dijo este lunes 28 a Efeagro que el acuerdo europeo sobre la PAC alcanzado la semana pasada entre las instituciones europeas «coincide con los intereses de España».
«Podríamos decir que este acuerdo europeo sobre la PAC coincide con los intereses de España y también con los de la Unión Europea. Calificamos el acuerdo de bueno y lo vamos a apoyar», dijo Planas antes del Consejo de Agricultura que se celebra este lunes en Luxemburgo y en el que el ministro confió que se de el visto bueno definitivo al pacto.
En concreto, Planas dijo que el acuerdo alcanzado la semana pasada, tras tres años de negociaciones, permite «mantener un equilibrio entre la rentabilidad de las explotaciones agrarias y ganaderas y el compromiso ambienta y contra el cambio climático» hasta 2027.
SIN PLAZO DE MOMENTO PARA REUNIRSE Y COMENZAR A PLANIFICAR LA APLICACIÓN EN ESPAÑA DE LA NUEVA PAC
Además, consideró positivos «los elementos de flexibilidad y subsidiariedad necesarias para aplicarlos a los planes estratégicos y (…) y además hacer este cambio de la mano de los agricultores, que nos parece absolutamente fundamental».
Sin embargo, el ministro no puso fecha aún a la reunión sectorial con los agricultores para elaborar los planes nacionales que Bruselas obliga a presentar para poder recibir las ayudas de la PAC.
«Vamos a concluir hoy el acuerdo y a partir de ese momento, espero en las próximas semanas poder reunir a la conferencia sectorial para lograr un acuerdo de aplicación en España de la PAC», dijo Planas.
El ministro calificó también como un buen punto del acuerdo los pagos redistributivos y su nivel mínimo «como los pagos a jóvenes» y lo relativo a las ayudas acopladas.
«Son instrumentos, creemos, muy oportunos para el próximo periodo y que entran plenamente dentro del diseño que habíamos efectuado desde España», aseguró.
El acuerdo alcanzado el pasado viernes entre las instituciones comunitarias logró desencallar los puntos principales de las negociaciones, entre ellos, los ecoesquemas.
Se llegó a un pacto para destinar el 25 % del primer pilar (pagos directos) a este instrumento que quiere incentivar las prácticas agrícolas y ganaderas que tengan un impacto más beneficioso para el clima y el medio ambiente.
También se decidió que solo las explotaciones que respeten los derechos laborales recibirán ayudas agrícolas, lo que empezará a aplicarse con carácter voluntario a partir de 2023 y obligatorio desde 2025.
Además, los Estados miembros repartirán al menos el 10% de las ayudas a las explotaciones agrícolas más pequeñas y los países tendrán que explicar en sus planes estratégicos cómo planean hacerlo.
Asimismo, se fijará un nuevo nivel mínimo obligatorio de apoyo a los jóvenes agricultores, que será del 3% de los presupuestos de los países para el apoyo a la renta de la PAC.
Se decidió también en este acuerdo europeo sobre la PAC que al menos el 3 % de la tierra cultivable se dedicará a la biodiversidad y todos los humedales estarán protegidos y «al menos» el 35% de las ayudas del segundo pilar (Desarrollo Rural) se destinarán a cuestiones medioambientales.
PLANAS QUIERE QUE EUROPA DEBATA SOBRE LA RENTABILIDAD DEL SECTOR GANADERO Y LA DEL TOMATE POR LAS IMPORTACIONES DE TERCEROS PAÍSES
Aunque está previsto que hoy se de el visto bueno a la PAC, los ministros continuarán el martes las discusiones sobre agricultura, en el que España «llamará la atención» sobre la situación de los mercados y en concreto sobre «dos que nos preocupan particularmente».
Uno de ellos el relativo al incremento del precio de las materias primas en el mercado ganadero. «La situación creada de la disminución de la rentabilidad en todos los sectores ganaderos es una preocupación que tenemos en España», explicó.
Y en segundo lugar, la situación del mercado del tomate y como las importaciones de países terceros afecta a la producción española en materia de precios y de superficie cultivada.
Planas también va a defender ante la Comisión Europea la necesidad de llegar a «un acuerdo ambicioso» respecto a los polinizadores, en particular, las abejas.
«El problema de la situación sanitaria de los polinizadores, el rango de mortalidad es un elemento fundamental para la biodiversidad, pero también para el conjunto de la actividad natural y agraria en el conjunto de la UE».