La comunidad musulmana de Ceuta celebrará el sacrificio ritual del «Eid al-Adha» este año, el sacrificio de un cordero por el cabeza de familia, al contar con abastecimiento de ganado, pese a las recomendaciones de Marruecos de no realizar esta práctica debido a la grave sequía que afecta a su territorio y al notable incremento de los precios del ganado.
Así lo ha comunicado la Delegación en Ceuta de la Comisión Islámica de España, quien ha destacado que los ceutíes sí llevarán a cabo esta festividad, prevista para el 6 de junio, tras mantener varias reuniones con representantes asociativos y empresas ganaderas locales.
Las condiciones en Ceuta «difieren notablemente» de las que han llevado al rey Mohamed VI de Marruecos a recomendar la suspensión del rito ya que en la ciudad hay abastecimiento de ganado al proceder exclusivamente de explotaciones ganaderas situadas en el territorio español.
En relación al encarecimiento del ganado, las ganaderías de Ceuta han mostrado una «extraordinaria disposición» para alcanzar un acuerdo de precios que facilite el acceso de las familias ceutíes al rito del sacrificio.
Por ello, se ha fijado un rango de precios que oscilará entre los 280 y los 300 euros por cabeza de ganado, lo que permitirá mantener la celebración «con dignidad y accesibilidad para todos», según el comunicado.
La Comisión Islámica de Ceuta ha resaltado la sensibilidad mostrada por las empresas del sector, que han «comprendido la relevancia religiosa, cultural y social» que tiene esta festividad para la población musulmana de la ciudad, situada en unas 35.000 personas.
«Entendemos que la decisión adoptada por Marruecos ha generado preocupación entre nuestra comunidad, debido a los lazos históricos y religiosos que compartimos, pero en Ceuta no hay motivo objetivo para cancelar el rito del sacrificio aunque cada familia será absolutamente libre y respetada», ha argumentado.
Además del acuerdo alcanzado con las empresas ganaderas, el Gobierno de Ceuta activará, como cada año, un dispositivo especial con mataderos móviles y controles higiénico-sanitarios para garantizar que los sacrificios domésticos se realicen conforme a la normativa vigente.