La Unión de Agricultores y Ganaderos de Aragón, UAGA-COAG, ha mostrado su sorpresa por la cotización del cereal de invierno en la Lonja del Ebro, con hasta 10 euros en la cotización menos respecto a Andalucía cuando se está empezando a cosechar la cebada en las comarcas de Monegros y Hoya de Huesca, por lo que exige transparencia en su funcionamiento.
En ese sentido, la organización agraria pide a este organismo que explique cómo y porqué ha establecido el precio de la cebada en 132 euros/tonelada para un peso específico de más de 64 maltería y en 126 €/Tm para un peso específico de entre 60 y 64, cuando todavía no hay operaciones de compra-venta.
Según explica la organización agraria en una nota de prensa se trata de una cotización muy por debajo de la fijada en años anteriores al inicio de la campaña.
En el resto de lonjas del territorio estatal, la cotización de la cebada también es a la baja, pero no tanto. Por ejemplo, en la Lonja de Córdoba, el 28 de mayo, se fijó el precio en 142 euros/tonelada. En cuanto a los precios de la cebada, tanto en el mercado internacional como en los puertos, éstos se mantienen estables.
Advierten de que que si no se corrigen estas operaciones «claramente especulativas», tendrán que emprender acciones jurídicas
UAGA apunta que esta campaña se espera una buena cosecha de cereales en Aragón, un factor que puede hacer que los precios bajen un poco. Sin embargo, recuerda que el consumo interno de cereales sigue una tendencia alcista, impulsada principalmente por la demanda para la fabricación de piensos, por lo que no entiende que se fije un precio de cotización tan bajo para la cebada.
En las comarcas de Monegros y Hoya, la mayor parte de la cebada no llega a 64 de peso específico, de ahí que el precio de 126 €/Tm configurado por la Lonja genera gran preocupación entre los agricultores.
Para solucionar esta situación de «desesperación» y generar confianza en el sector cerealístico, UAGA señala que las cooperativas deberían aconsejar a los agricultores no vender a esos precios y ofrecerles un almacenamiento en condiciones hasta que el mercado se estabilice.
Además, recuerda que la función de cualquier lonja es informar sobre los precios, que deberían formarse teniendo siempre en cuenta los costes de producción, para orientar a compradores y vendedores a la hora de hacer operaciones comerciales, y por tanto, dar transparencia a los mercados. Una realidad que, con estos precios, queda en entredicho y hace sospechar de «movimientos especulativos» de los grandes operadores.
A finales de marzo, cuando apenas habían transcurrido 10 días del confinamiento, se produjo en la Lonja del Ebro una situación contraria a la de ahora, y entonces se suspendió la cotización en el ovino.
En aquel momento, UAGA denunció que la lonja dejaba a los ganaderos desamparados al no fijar un precio de compra-venta de los corderos. Sin embargo esta semana sin haber operaciones de compra y venta de cebada, sí que ha fijado cotización en esta producción.
Por tanto, la organización agraria manifiesta que «si no se corrigen estas operaciones claramente especulativas, tendrá que emprender acciones jurídicas para evitar este abuso de compradores hacia los agricultores y ganaderos». Y por todo ello se plantea retomar las movilizaciones de “Agricultores Al Límite”