Portugal está ganando terreno a la enfermedad letal de la tinta  del castaño que sufren miles de árboles gracias a un plantón híbrido de las variedades de Japón y de Europa, inmune al hongo que desarrolla la dolencia.

El carbón o tinta del castaño es producida por el hongo «Phytophthora», que acaba pudriendo al árbol con una enfermedad que se reconoce por el tono negruzco que deja en las raíces atacadas y que ha acabado con miles de castaños en la Península Ibérica.

Portugal está repoblando los montes con una variedad de castaño híbrido, mezcla del castaño europeo con el japonés

Como no hay un tratamiento eficaz, «la solución pasa por repoblar los montes con una variedad de castaño híbrido, que es una mezcla del castaño europeo con el japonés», explicó el profesor de Fisiología Vegetal de la Universidad de Trás-os-Montes de Portugal José Lourenço durante una entrevista con Efe.

El profesor aseguró que están distribuyendo estos castaños entre los agricultores lusos, ya que «están libres de la enfermedad de la tinta e inmunizados» contra el hongo que la desarrolla.

TINTA DEL CASTAÑO 2Sin embargo, por desconocimiento, muchas de las repoblaciones que practican los agricultores de Portugal se hacen con castaños europeos, una variedad que no está inmunizada y que, por lo tanto, es probable que pasados unos años sea atacada por el hongo que genera la letal tinta.

Al año, explicó el profesor, se plantan en Portugal alrededor de 200.000 castaños, de los que sólo unos 20.000 son variedades híbridas inmunizadas.

La castaña es una fuente de riqueza para algunas comarcas del norte de Portugal, por lo que productores, científicos y vendedores desarrollan proyectos conjuntos para mejorar su productividad.

Brangança, Vinhais, Valpaços y Trancoso son las cuatro comarcas de Portugal con mayor número de hectáreas productoras de castañas, con una superficie total entre las cuatro que se aproxima a las 15.000 hectáreas.

Se deja de recolectar en torno a 50 kilos de castaña por cada árbol enfermo

Esta última zona, Trancoso, en la frontera con las provincias de Salamanca y Zamora, es la más afectada por la tinta, ya que «la padecen el 50% de todos sus castaños».

«Es algo muy grave», explicó Lourenço, no sólo a nivel medioambiental sino que también supone una merma significativa para el productor, que deja de recolectar en torno a 50 kilos de castaña por cada árbol enfermo.

TINTA DEL CASTAÑO 3El titular de Fisiología de la Universidad de Trás-os-Montes también se refirió a la necesidad de implantar los sistemas de regadío para evitar malas cosechas como la de este 2016.

«Ha sido un verano muy seco, sobre todo en septiembre, por lo que el fruto no se ha desarrollado bien», argumentó.

Esto ha supuesto un descenso medio de recolección de un 30% en el total del país, aunque ha sido paliado con un mejor fruto.

Si en un año normal el 25% de las castañas suele pudrirse por la presencia de gusano en su interior, en esta cosecha sólo tenían gusanos el 5% de los frutos recogidos.

En Portugal, la producción media anual es de 45.000 toneladas de castañas y en esta campaña que acaba de concluir ha habido un descenso de unas 15.000 toneladas, debido a la falta de precipitaciones en el mes de septiembre.

Cabe destacar que en España, la campaña de la castaña ha finalizado en casi todas las zonas productoras, con excepción de Extremadura, y precios medios pagados al productor de entre 0,80 y 2,00 euros/kilo, en función de calibres, variedades y calidad del producto.

(Texto: Carlos García / Efeagro)

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