El estudio, que constituye la tesis doctoral defendida en la CEU-UCH por la investigadora Marta González Clari, ha sido dirigido por Manuel Láinez, director del Instituto Nacional de Investigación y Tecnología Agraria y Alimentaria (INIA); Santiago Vega, decano de la Facultad de Veterinaria de la CEU-UCH; y Clara Marín, profesora del Departamento Producción y Sanidad Animal de esta Universidad.
Los datos de la European Food Safety Authority (EFSA), según los cuales en España se declararon el 8,3% de los brotes de origen alimentario de la UE y la bacteria Salmonella spp. es el agente implicado con mayor frecuencia, animaron a centrar este trabajo en el sector porcino, uno de los menos estudiados en este sentido, a pesar de que la carne de cerdo es el cuarto alimento que con más frecuencia causa los brotes de Salmonella.
Tres veces más presencia de la bacteria en cerdos
Según destaca la investigadora Marta González, autora del estudio, España lidera en Europa la prevalencia de infección por Salmonella en cerdos: “Mientras que la media en la UE es del 10,3%, en España, segundo productor de porcino en Europa por detrás de Alemania, la prevalencia registrada es la máxima del continente: un 29%. Este alto porcentaje fue el que nos llevó a estudiar las fuentes de contaminación de los cerdos en las granjas de engorde, en todas las fases de la producción porcina, así como evaluar la eficacia de las medidas de limpieza y desinfección en este tipo de instalaciones”, señala la investigadora de la CEU-UCH.
“En total, se ha detectado presencia de Salmonella en el 20,7% de las 3.255 muestras analizadas”, destaca Marta González sobre el estudio epidemiológico, realizado sobre un total de 51 explotaciones porcinas de la Comunidad Valenciana pertenecientes a 9 empresas, en las que se han analizado un total de 89 lotes de cerdos como muestra del estudio.
Para ello, se ha medido la presencia de la bacteria en las heces de los cerdos, el pienso en silos y tolvas, el agua en depósitos y bebederos, el polvo y la superficie de corrales y pasillos y las manos y botas de los granjeros, tanto antes como después de los procesos de limpieza y desinfección llevados a cabo en las instalaciones. Además, la toma de muestras se ha realizado en distintas fases: a la llegada de los lechones, durante el periodo de cebo y al finalizar el periodo de engorde, así como en el transporte hacia el matadero.
Poca capacidad de desinfección
Los procedimientos de limpieza y desinfección empleados habitualmente en las instalaciones de producción porcina, consistentes en el uso de agua fría a presión, secado y uso de desinfectantes, resultan insuficientes, según la investigación de Marta González, ya que la presencia de la bacteria solo se redujo un 8 por ciento tras las labores de limpieza: “Los resultados mostraron que el 78,7% de las explotaciones porcinas fueron positivas a Salmonella antes de la limpieza y desinfección y el 70,8% permanecieron positivas después en alguna de las muestras recogidas, lo que demuestra que los procedimientos de limpieza y desinfección aplicados en las granjas de la Comunidad Valenciana resultan insuficientes para eliminar Salmonella de las explotaciones de cerdos”, señala la investigadora de la Facultad de Veterinaria de la CEU-UCH.
Su estudio también ha analizado la capacidad de las distintas cepas de Salmonella detectadas para producir biofilm, una película protectora que protege a la bacteria de la acción de los desinfectantes habitualmente empleados para limpiar estas instalaciones, ya que esta capacidad de resistencia es la causa de que la contaminación se reduzca tan poco. “El 69% de las cepas aisladas de las diferentes fuentes de contaminación en el sector porcino es capaz de producir biofilm. Por ello, es necesario realizar más estudios para valorar la eficacia de los diferentes desinfectantes, las concentraciones adecuadas y su forma de aplicación en condiciones de campo, así como comparando su eficacia con cepas productoras y no productoras de biofilm para poder sacar conclusiones definitivas”.
Transporte al matadero
La investigación revela además que el transporte al matadero en camiones es otro lugar frecuente de contagio de Salmonella en los cerdos de engorde, puesto que en el 38,3% de estos camiones se ha detectado la presencia de la bacteria. “Hemos detectado que el transporte al matadero induce un aumento significativo en los porcentajes de detección de Salmonella. El muelle de descarga, pasillo y corrales de los mataderos donde son alojados los cerdos en espera del sacrificio están altamente contaminados con Salmonella, siendo una importante fuente de contaminación para los cerdos inmediatamente antes de ser sacrificados, a investigar en posteriores estudios”, señala la investigadora de Veterinaria de la CEU-UCH Marta González Clari.
La tesis, titulada “Epidemiología de la Salmonella spp. en cerdos de engorde”, defendida por Marta González en la Facultad de Veterinaria de la CEU-UCH con la calificación de Sobresaliente Cum Laude, ha sido desarrollada con la colaboración del Instituto Valenciano de Investigaciones Agrarias (IVIA), la Conselleria de Agricultura, Pesca, Alimentación y Agua de la Generalitat Valenciana y el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente.
(Foto: Archivo www.interempresas.net)