La huelga en el sector del transporte y la imposibilidad de exportar aceitunas desde España ha hecho que el producto de Turquía, Marruecos o Portugal se posicione en los mercados internacionales, debido a la paralización de las principies empresas españolas del sector.
El secretario general de la Asociación Española de Exportadores e Industriales de Aceitunas de Mesa (ASEMESA), Antonio de Mora, ha lamentado este jueves 24 que, como se preveía, desde el pasado viernes han ido cesando en su actividad las empresas del sector, lo que ha provocado ya que se pierdan unos 1.500 empleos.
Una cifra, ha dicho, que puede llegar a los 7.000 “si no se alcanza una solución cuanto antes”, según De Mora, que ha lamentado que la aceituna española ha perdido posiciones en los mercados internacionales, al colocarse en su lugar la procedente de países como Turquía, Marruecos o Portugal.
Según Asemesa, la situación de huelga de transporte está originando en el sector «graves problemas de abastecimiento y de salida de productos”, y la mayoría de la plantilla de estas empresas se ve afectada, con la consiguiente repercusión en los 8.000 empleos directos que genera este sector, sin tener en cuenta los efectos sobre la industria auxiliar y otros proveedores.
Por ello, Asemesa ha reclamado a la Administración «que se implique y busque soluciones urgentes al problema, que está provocando ya graves pérdidas al sector, especialmente en Andalucía, comunidad que representa el 80 % del mismo con más de 200 empresas”.
Un problema que se está repitiendo en todo el sector, ya que las asociaciones representantes de la industria aceitera española, Anierac y Asoliva, han comunicado que, debido a la huelga del transporte, las empresas del sector se están viendo abocadas a cerrar sus instalaciones ante la falta de materia prima y material auxiliar para poder seguir operando, lo que ha provocado que esta situación esté pasando factura a nivel internacional, toda vez que los clientes, «al no poder recibir mercancía de las empresas españolas, están comenzando a romper contratos y a aprovisionarse de aceite en países tradicionalmente competidores».