La Red Estatal del Castaño espera que para la campaña del 2018 «se vislumbre» la suelta masiva del insecto depredador de la avispilla del castaño, una de las plagas más dañinas para los castañares y sus ecosistemas, una vez detectada su presencia en El Bierzo (León) y constatada su rápida propagación.

El secretario técnico de la Red Estatal del Castaño, Roberto Rubio, ha explicado a Efeagro que es preciso que el Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente (Mapama) no retrase más allá del 2018 esta decisión, porque «no tiene sentido», si se quiere salvar este hábitat y los recursos que genera.

Ha insistido en que la lucha biológica con el «Torymus sinensis» contra la avispilla del castaño («Dryocosmus kuriphilius») es clave para salvaguardar el patrimonio natural y paisajístico del castaño, así como para mantener la economía de las zonas rurales que viven de su recolección, venta y transformación.

La Mesa del Castaño de El Bierzo lanzó la semana pasada la voz de alarma tras haberse localizado la avispilla del castaño en el Valle de Valcare (León), lindando con Lugo, una comarca con una gran tradición en la explotación de este recurso natural.

El «Torymus sinensis» es el único parasitoide específico capaz de controlar la plaga por medios biológicos

Desde que en 2012 se detectara este insecto por primera vez en España, ya se ha encontrado en áreas de Andalucía, Asturias, Cantabria, Castilla y León, Cataluña, Euskadi, Galicia y Navarra.

El «Torymus sinensis» es el único parasitoide específico -insecto depredador de la avispilla el castaño- capaz de controlar la plaga por medios biológicos y sin que suponga un riesgo para las especies nativas de avispillas.

Ha recordado que hasta la fecha el Mapama ha autorizado la suelta experimental del «Torymus sinensis» en Andalucía y Galicia (primavera de 2016) y en esta primavera del 2017 también en el Principado de Asturias. De hecho, en Andalucía ya se ha soltado este depredador en abril del pasado año.

A pesar de que los primeros indicios parecen indicar que la nueva área afectada en la comarca de El Bierzo «no es muy grande», Rubio ha advertido de la rápida expansión de la plaga, así como de los daños económicos y medioambientales que genera.

En la reunión de hace aproximadamente un mes con responsables del Mapama, la Red hizo hincapié en lo «extremada e inusitadamente rápida» que se produce la extensión de la plaga de la avispilla, que lleva presente en Europa desde 2002, cuando se detectó por primera vez en Italia, y diez años después en España.

El Ministerio ha informado a la Red de que se continúa con los trabajos previos de investigación para proceder a autorizar la suelta masiva, según Rubio.

Los estudios indican, ha señalado Rubio, que «el asentamiento del ‘Torymus’ es positivo, ya que al año siguiente a su suelta sigue habiendo ejemplares, porque ha sido capaz de reproducirse» y que no ha interferido con la flora y fauna locales.

Aunque ha valorado la «escrupulosidad» con la que el Mapama afronta el asunto, Rubio ha insistido en que es clave -para evitar daños mayores e invertir más medios humanos y económicos en luchar contra la plaga- «ir a la par del avance de la avispilla del castaño» y «cuanto antes se actúe la erradicación será mejor».

En Europa, la suelta del «Torymus sinensis» no ha afectado a especies locales, ni causado desplazamientos de la fauna local

Ha apuntado que «no tiene sentido» retrasar la autorización, sobre todo, porque, al igual que la avispilla del castaño llegó a España, también es de esperar que entre su depredador, ya que países vecinos como Francia y Portugal ya autorizaron la suelta masiva.

En estos países, al igual que en Italia, la suelta del «Torymus sinensis» no ha afectado a especies locales, ni causado desplazamientos de la fauna local (tal y como también apuntan los estudios en España).

La avispilla del castaño puede llegar a reducir la producción del castaño en hasta un 80 %, ha recalcado el secretario técnico de la Red Estatal del Castaño, órgano que agrupa a los representantes del sector de la castañicultura de las regiones productoras más importantes de España.

En España existen en torno a 300.000 hectáreas de bosques de castaño, de las que 110.000 se destinan a la recolección del fruto y cuyas principales zonas productoras son Galicia, Castilla y León, Andalucía y Extremadura; no obstante, en Asturias se localiza la mayor superficie de castañar de España.

×