El Ministerio para la Transición Ecológica y Reto Demográfico ha rechazado el plan extraordinario de extracción del lobo ibérico que presentó el Gobierno de Cantabria, para poder controlar la especie, y ha respondido a la comunidad que debe esperar a la renovación del plan de conservación de este animal.

El consejero cántabro de Medio Ambiente, Guillermo Blanco, ha anunciado este lunes a los periodistas esa respuesta del Ministerio, antes de acordar con las organizaciones agrarias y ganaderas un escrito que remitirán al departamento que dirige Teresa Ribera para advertirle de que no se puede esperar a ese plan de conservación porque «puede llevar meses».

Y es que Blanco ha asegurado que desde septiembre hasta finales de marzo el lobo ha matado en Cantabria 690 cabezas de ganado en 506 ataques y ha avisado de que esos ataques aumentarán los próximos meses porque el ganado está en el monte y las lobas han parido.

Asimismo, esta respuesta del MITECO no solo no va a calmar los  ánimos de los ganaderos cántabros, sino que no se escarta que vuelvan las protestas y movilizaciones a la región.

De igual forma, represeta un varapalo después de que   el Tribunal Superior de Justicia de Cantabria (TSJC) desestimarael pasado mes de marzo el recurso presentado por la Asociación para la Conservación y Estudio del Lobo Ibérico (ASCEL) contra la resolución del Gobierno regional que establece el cupo de extracción de ejemplares de esa especie para la temporada 2020-2021, dentro del plan de gestión del lobo.

En su sentencia, la Sala de lo Contencioso-Administrativo del TSJC señalaba que «el lobo constituye una especie de interés comunitario y, como tal, protegida», si bien, precisa que «por el grado de protección al norte del río Duero, se permite la adopción de medidas de gestión y actividad cinegética, siempre que se mantenga la especie en estado de conservación favorable y que no se comprometa su conservación».

×