La Unión de Campesino de Castilla y León (UCCL) ha mostrado su rechazo a la posibilidad de un presupuesto único a aplicar por cada país para todas las políticas europeas, al considerar que la «PAC debe mantenerse como una política específica y debe destinarse a quienes realmente viven de la agricultura y la ganadería».
El pasado mes de febrero la Comisión Europea presentó dos documentos interesantes, uno sobre la agricultura y la alimentación y otro sobre el nuevo Marco Financiero Plurianual. A través de la organización estatal, Unión de Uniones, ya se presentaron sus observaciones.
Sin embargo, desde la UCCL «nos hemos centrado en la absoluta necesidad de mantener un presupuesto específico para la PAC, como política singular y altamente estratégica para Europa, presupuesto que incluso debe incrementarse para adecuarlo al IPC de los últimos años y así tener la capacidad necesaria para hacer frente a los nuevos retos productivos impuestos y compensar las alteraciones de los mercados».
En este sentido, destacan en una nota de prensa que el documento habla de que la PAC debe destinarse a “aquellos que más lo necesitan” sin clarificar quiénes son estos. Para la UCCL «está claro. Los destinatarios deben ser los que realmente viven de la agricultura y la ganadería, los profesionales del sector, Agricultores/as y Ganaderos/as a Título Principal».
Por otra parte, insisten, además de rechazar esa opción de un presupuesto único, en que la cadena de suministro alimentario «debe ser más justa y para ello es necesario que la protección que se otorga al sector productor se incremente y se haga más efectiva. Por tanto, la propuesta de modificación de los Reglamentos de la U.E. en este sentido, no nos convence, pues nuevamente no se centra en dotar de herramientas, tales como determinar posición de dominio, contratos por escrito y costes oficiales de producción”.
Por último destacan que siguen manteniendo la necesidad de establecimiento de cláusulas espejo en todas las relaciones con terceros países y en que la agricultura no sea nunca moneda de cambio en las negociaciones internacionales.