Esta semana Dcoop mostraba orgullosa la llegada del mayor buque granelero de la historia del puerto de Málaga (54.000 toneladas) cargado con maíz procedente de Estados Unidos para abastecer las fábricas de piensos de sus cooperativas ganaderas asociadas, que necesitan 250.000t de materias primas al año. Sin embargo, sólo un día después su barco ha ‘encallado’, ya que desde la Unión de Extremadura se ha criticado su compra en lugar de apostar por el cereal nacional, en especial cuando su producción de maíz en esta región se está viendo reducida por la caída de los precios y de la rentabilidad de su producción.
Desde la organización agraria se supone que esta actuación estará motivada por el mejor precio que tendrá en el mercado las producciones norteamericanas con respecto al cereal producido en España, «pero nos extraña», según indica en una nota de prensa, donde recuerda que en la lonja de León se han publicado los precios actuales de los cereales «y podemos comprobar que el maíz está a 174 € la tonelada y la cebada a 162 €, por lo que el ahorro de la importación anunciada no puede ser significativo».
Sin intentar entrometerse en las políticas comerciales de las distintas cooperativas, La Unión Extremadura quiere «aconsejar a los consumidores de cereales de nuestro país, que en la medida que puedan y siempre que las condiciones económicas lo permitan, que consuman cereal producido por nuestros agricultores».
La organización reconoce que posiblemente el cereal norteamericano «esté algo más barato, pero posiblemente también la carne brasileña o argentina lo esté, y no creo que les hiciese mucha gracia a las cooperativas ganaderas españolas las importaciones masivas de carne de otros países por ahorradnos unos €».
Tras recordar que en Extremadura ha disminuido la superficie de maíz 35.000 has en los últimos 15 años, y si no bajamos de las actuales 49.000 has es debido a que con precios de 170 €/ha apenas cubren los agricultores apenas cubren los costes de producción, hace un llamamiento para que «la simbiosis entre cooperativas productoras deba ser total, ya que si entre productores agrarios de España no hay solidaridad, ¿a quién se la vamos a pedir? ¿A las multinacionales productoras de piensos?».