El consejero de Agricultura, Agua y Desarrollo Rural de Castilla-La Mancha, Francisco Martínez Arroyo, ha puesto de manifiesto su “compromiso absoluto” con el sector olivarero, especialmente de bajo rendimiento, así como con aquellas familias – más de 66.000 – que están detrás del  este olivar de bajo rendimiento en la región. Por eso, ha dejado claro que en, en el caso de que no contara con una ayuda acoplada específica en la PAC, el Gobierno de Castilla-La Mancha la creará en el nuevo Programa de Desarrollo Rural (PDR).

De esta forma se lo ha trasladado Martínez Arroyo a los representantes de las empresas y cooperativas más representativas del sector olivarero en España, en la reunión que han mantenido este miércoles en Toledo, ha señalado la Consejería de Agricultura, Agua y Desarrollo Rural en una nota de prensa.

La ayuda para el olivar de bajo rendimiento será uno de los asuntos que este jueves llevará el consejero a la Conferencia Sectorial monográfica para fijar una posición política sobre la Política Agrícola Común (PAC), donde insistirá en que en el caso de que no haya una discriminación positiva para este olivar se creará un ayuda dentro del PDR.

Desde Castilla-La Mancha se viene defendiendo la diferenciación entre el olivar bajo rendimiento y el superintensivo o intensivo a capa y espada, y es que el primero de ellos, “si no cuenta con un apoyo de la administración”, ha resaltado Arroyo, “es difícil que pueda competir en los mercados”.

También en este encuentro se han abordado los efectos de la Ley de Cadena Alimentaria y la nueva norma de calidad en la que trabaja el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación.

El consejero ha destacado la “buena sintonía” y la coincidencia en un “planteamiento común” que tiene como objetivo principal mejorar la calidad del sector del olivar y dar soluciones a sus problemas.