Cooperativas Agro-alimentarias Castilla-La Mancha ha acordado activar medidas de autorregulación a través de la cual las cooperativas castellanomanchegas se comprometen a elaborar un volumen importante de mosto en la presente campaña, de la variedad Airen sobre todo, en concreto el 25% de la entrada de uva de esta vendimia, que supondría unos 5 millones de hectolitros, aproximadamente.
Además de esta cantidad, el compromiso también incluye retirar temporalmente del mercado la mitad de dicho volumen -bien sea en forma de mosto o de vino sin IGP ni DOP y vino varietal- mediante almacenamiento privado en las instalaciones propias hasta finales del próximo mes de abril, ha informado esta organización este miércoles en un comunicado de prensa.
Esta estrategia supone un «hito» en la historia de las bodegas cooperativas de España que pone en valor la «madurez» y «unión» del sector, ha advertido.
Solo en Castilla-La Mancha, las bodegas cooperativas elaboran alrededor del 80% de la producción de vino y mosto por lo que estrategias conjuntas de este calado «permitirán hacer frente a los desequilibrios de mercado entre la oferta y la demanda, y trabajar por un mayor beneficio para nuestras cooperativas y valor añadido de nuestros socios», ha señalado el presidente de la organización, Ángel Villafranca.
SE PRETENDE REDUCIR EL VOLUMEN DE VINO EN EL MERCADO PARA EQUILIBRAR LA OFERTA CON LA CAÍDA DE LA DEMANDA Y DEL CONSUMO, Y ACTUAR CON RESPONSABILIDAD
Con la decisión de activar medidas de autorregulación, que no están dotadas de presupuesto económico, se pone en marcha según recoge el Reglamento comunitario 2020/975 que autoriza acuerdos sobre medidas de estabilización del mercado vitivinícola que desarrolla el Artº 222 de la OCM Única.
Es una medida voluntaria, pero desde Cooperativas Agro-alimentarias Castilla-La Mancha se entiende que «es muy importante la participación del mayor número de bodegas cooperativas de la región, pues los efectos positivos que se puedan lograr con dicha medida, especialmente en el equilibrio y en la estabilidad de los mercados, redundarán en beneficio de todos».
Se trata de un compromiso a cumplir por parte de las bodegas cooperativas que hayan elaborado mosto esta campaña.
El protocolo de cumplimiento y control de estas medidas de autorregulación será realizado por los servicios técnicos de Cooperativas Agro-alimentarias Castilla-La Mancha, con medios propios.
El objetivo de este acuerdo es el de tratar de paliar las consecuencias negativas provocadas por la pandemia de covid-19, especialmente en la drástica caída del consumo de vino a nivel mundial y en las perturbaciones económicas que este hecho provocará en los viticultores y empresas cooperativas de la región.
«Con ello se pretende revalorizar el resto de transformados vinícolas, reducir el volumen de vino en el mercado para intentar equilibrar la oferta con la referida caída de la demanda y del consumo, y actuar con responsabilidad ante una campaña de comercialización difícil e incierta», ha subrayado.
A ver, Junta de CLM, menos fotos con ellos y más denuncias.
Las cooperativas cerealistas, que son las que yo conozco, funcionan exactamente como la mafia. Tienes arriba al capo y los consejeros, que hacen y desahacen a su antojo. Luego sus sicarios, que son los paniaguados que siguen la voz de su amo. Los últimos del escalafón, los agricultores que ni pinchamos ni cortamos y seguimos (o siguen) por inercia lo que dicen los demás.
Así nos va, ellos aprovechándose de los demás, conchabados con los sindicatos agrarios para quedarse con todo el comercio. Como lo consigan, adiós al agricultor cerealista.
Pues yo no lo veo tan grave tambien lo hacen las petroleras o las elécticas y no pasa nadao. Lo que pasa es que lo del campo se magnifica todo.
La verdad es que no paro de sorprenderme. Cierto que la noticia en sí no es sorprendente porque estamos muy acostumbrados a cosas de estas. Lo que asombra realmente es que una entidad anuncie un delito a bombo y platillo y los poderes públicos no hacen nada para pararlo.
La cooperativas son entes perversos que chupan de la teta pública como bebés insaciables y ya no les basta alteración del mercado que supone la cantidad de subvenciones, ayudas, etc que reciben. Ahora hasta se atreven a anunciar que se ponen de acuerdo para ‘hacer frente a los desequilibrios de mercado entre la oferta y la demanda’, es decir, influir a su antojo en el mercado libre. Mientras tanto, las administraciones que son conscientes del ‘monstruo’ que han creado, se mantienen en siliencio para esperar que la noticia pase de tapadillo.
Los beneficios como siempre se los llevaran los consejos de administración y algún que otro corrupto que ponga la mano.
Los socios agricultores se quedarán a verlas venir, a rezar para que el invento salga bien y les quede alguna miguita del pastel. Eso sí, si el invento sale mal, que se preparen, porque el beneficio no se reparte, pero las pérdidas, sí.
Preocupado, has descrito la situación de forma brillante. Esto es una vergüenza.
Pues si es un delito es una mala ley. Subir el precio del producto es bueno para el agricultor y para todos los trabajadores
Cooperativas actúa como una banda de mafiosos. Atan y desatan a su antojo con la connivencia de las administraciones públicas que, para más inri, las riegan con dinero público.
Y lo peor de todo es que muchas veces los cooperativista ni se enteran de nada. Son ovejas en manos de los consejos rectores
Y digo yo, ¿no debería la CNMC actuar de oficio en estos casos? Un organización acordando unas medidas para alterar el libre mercado ¡Y encima lo publicitan como si nada!
Esto es el … de La Bernarda. Panda de chorizos impunes.
Pero, ¿ponerse de acuerdo para alterar el mercado no es delito?
Flipo.
Lo que es delito son los precios bajos y si con estas medidas suben, bien bebidas sean
Bienvenidas