Cooperativas Agro-alimentarias de Andalucía, con el apoyo de la Confederación Española de la Economía Social (CEPES), ha ejecutado desde 2021 un proyecto para impulsar la competitividad empresarial de sus cooperativas federadas. La iniciativa se financia con cargo al Fondo Social Europeo y se divide en tres líneas de trabajo: la asistencia técnica, la formación y el asesoramiento en procesos de integración.
En materia de asistencia técnica, la federación ha ofrecido un amplio catálogo de servicios a sus 641 cooperativas federadas, con el único objetivo de mejorar los procesos productivos en estas industrias, favorecer la creación de empleo y lograr la diferenciación de los productos cooperativos en los mercados.
De hecho, desde el 1 de enero de 2021 al 31 de agosto de 2023, la federación ha realizado un total de 134 programas dentro del proyecto ‘Mejora de la Competitividad de las Cooperativas Agrarias Andaluzas a través de procesos de calidad, seguridad, innovación, digitalización y comercialización’.
La finalidad es ofrecer asesoramiento a las cooperativas en distintas materias. Así, entre otras, se han realizado un total de 36 programas de asesoramiento técnico en el etiquetado de los productos de origen cooperativos, proponiendo mejoras; 28 relativos a mejorar la seguridad industrial respecto a la venta de suministros, mediante diagnóstico a través de un checklist; y se han realizado 24 actividades de guía para la renovación de maquinaria o la adquisición de equipos más eficientes.
Por otro lado, se han llevado a cabo 17 actividades de asistencia técnica para la ejecución de inversiones de las cooperativas hortofrutícolas, adaptándose a la normativa de los programas operativos de las OPFH y nueve estudios sobre implantación de la Prevención de Riesgos Laborales. Además, se han realizado un total de siete diagnósticos en cooperativas en materia de sostenibilidad, usando la herramienta eSIAB desarrollada por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación para medir cómo de sostenible es la industria alimentaria. También se han desarrollado cuatro programas para la implantación de certificados de gestión de la calidad y otros seis programas ejecutados han versado sobre digitalización.
En materia de formación, la federación ha impartido un total de 60 cursos en los que se han beneficiado 59 cooperativas de distintas provincias andaluzas. Estas acciones han contado con la participación de más de un millar de alumnos, quienes han recibido una completa formación durante 1.530 horas contabilizadas en los tres últimos años (de 2021 a 2023).
En concreto, se han impulsado distintos programas para instruir a los profesionales agrícolas en la correcta aplicación de productos fitosanitarios; se han formado a los ganaderos en materias relacionadas con el bienestar animal y también se ha ejecutado acciones para preparar a las plantillas en cuestiones de manipulación de alimentos.
El programa de capacitación para ser aplicador de productos fitosanitarios ha sido uno de los más demandado por las cooperativas. Prueba de ello, desde el 2021 se ha impartido un total de 28 cursos de aplicador de plaguicidas, para dar respuesta a la demanda de formación que exige la normativa emitida por la Consejería de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible, que regula la expedición del carné de Usuario de Productos Fitosanitarios.
FUSIONES COOPERATIVAS
Por último, en materia de fusiones, se han ejecutado dos grandes proyectos, uno en la provincia de Sevilla y otro en la de Jaén. El primero de ellos se materializó con la fusión de las cooperativas sevillanas Oleand y Manzanilla Olive en la nueva entidad ‘Oleand Manzanilla Olive’, la mayor cooperativa olivarera de primer grado de la provincia y una de las diez más grandes de Andalucía por volumen de facturación. El segundo tuvo lugar en el municipio jienense de Fuerte del Rey, con la fusión de las cooperativas San Isidro y Nuestra Señora del Rosario en la nueva entidad Oleo Rey.
El director gerente de Cooperativas Agro-alimentarias de Andalucía, Jaime Martínez-Conradi, ha valorado “el éxito de las iniciativas realizadas en las tres últimas anualidades” y ha resaltado que “la finalidad de estas actividades no es otra que favorecer la consolidación de las empresas cooperativas para mejorar su competitividad empresarial y hacerlas solventes, rentables y competitivoas, además de destacarlo como motor de empleo en los núcleos rurales”.