"Durante más de 125 años hemos unido a la gente. Hoy, queremos que la gente se una para combatir un problema que nos importa a todos nosotros: la obesidad", arranca el anuncio, en el que se recuerda que, como la mayor empresa de bebidas de EEUU, Coca-Cola puede "jugar un papel importante" en esta lucha.
El spot es la primera iniciativa de una campaña para abordar el problema de la obesidad que continuará con un segundo anuncio que se emitirá a partir del miércoles, en el que se hará hincapié en que las latas de Coca-Cola dejan claro que incluyen 140 calorías y en el que se anima a la gente a "pasarlo bien quemando esas calorías".
"Esto tiene que ver con la salud y felicidad de todo aquel que compra nuestros productos y quiere bebidas con unos sabores increíbles, capacidad de decidir e información", dijo el director de la división de bebidas gaseosas de Coca-Cola Norteamérica, Stuart Kronauge, en un comunicado.
El anuncio llega cuatro meses después de que las autoridades sanitarias de la ciudad de Nueva York dieran luz verde a la polémica prohibición de los refrescos azucarados en envases superiores a 16 onzas (0,464 litros), una medida que entrará en vigor en marzo y que puso en pie de guerra a las grandes compañías de refrescos de EE.UU.
Un mes después de que Nueva York aprobase esa legislación, Coca-Cola, PepsiCo y otros grandes fabricantes de refrescos accedieron a informar del contenido calórico de sus bebidas en las máquinas expendedoras en algunas ciudades de EE.UU.