ANIERAC, la Asociación Nacional de Industriales Envasadores y Refinadores de Aceites Comestibles, ve inviable moderar el precio del aceite de oliva si continua adelante la implantación del nuevo impuesto al plástico para la industria alimentaria, lo que en su opinión supondría un nuevo varapalo económico para el consumidor, que afrontaría un coste añadido para un producto de primera necesidad.

De hecho, para la asociación alimentaria, la petición que el Ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación Luis Planas realizó esta semana para que todos los eslabones de la cadena alimentaria hagan un esfuerzo en la moderación de los precios del aceite de oliva choca de bruces con la realidad de un año donde la escasez de lluvia ha dado lugar a una producción exigua y un baile de precios que aún estamos sufriendo.

ESPAÑA ES EL ÚNICO PAÍS QUE CONTEMPLA LA ENTRADA EN VIGOR DE UN IMPUESTO DE ESTAS CARACTERÍSTICAS; MIENTRAS QUE EN EUROPA POSPONEN SU APLICACIÓN

La aplicación de este impuesto, que entrará en vigor el próximo uno de enero solo en España, vendría a sumar un coste añadido que afectaría a la industria del aceite en general -oliva, vegetales, semilla…- y que supondría un nuevo gravamen económico para el consumidor en un producto de primera necesidad como el aceite.

De esta manera Anierac se une a la petición de la Federación Española de Industrias de Alimentación y Bebidas (FIAB) para retrasar la entrada en vigor del Impuesto a los envases de plástico no reutilizables, y que significaría un coste estimado para toda la industria agroalimentaria española de 690 millones de euros.

Cabe recordar que España es el único país europeo que contempla la implantación del nuevo impuesto al plástico de estas características en 2023; mientras que otros países europeos como Italia siguen posponiendo su aplicación, ante su actual situación económica.

×