La reciente aprobación del Real Decreto-ley 4/2023 de 11 de mayo, el conocido de manera más coloquial como ‘Decreto de la Sequía’, ha despertado malestar en el seno del sector de la ganadería de la Comunidad de Madrid por la catalogación oficial que ha recibido la región y el consecuente impacto en las partidas económicas que se percibirán, dentro de un contexto muy complicado tanto por la falta de pastos naturales debido al bajísimo régimen de precipitaciones de esta primavera como por el alza de los precios y la carestía de piensos y forrajes, según denuncia Asaja Madrid.
De acuerdo con esta distinción, el Gobierno Central ha establecido tres zonas distintas: zonas de afección alta, media y moderada. Cada una cuenta con un específico nivel de daño y de peligro, desde un punto de vista climático, y en este sentido la Comunidad de Madrid ha sido incluida en la zona 2, afección media.
Según explica Francisco José García, “esto significa que de acuerdo con esta catalogación los ganaderos de Madrid percibirán la mitad de las ayudas con respecto a otras regiones. El problema aquí es entrar en la catalogación de la sequía por niveles. No se puede hablar de una sequía de primera o de segunda, es un problema uniforme. Solo sus efectos son más o menos patentes, pero la sequía es global, universal”.
Esta distinción por zonas también plantea unos importes máximos de ayudas en función de esas zonas. Para la Comunidad de Madrid estos máximos ascienden a 78,50 euros por vaca de carne (nodriza), 9 euros por oveja y cabra de carne, 30,50 euros por vaca de leche y 5,50 euros por oveja y cabra de leche. Las ayudas solo se concederán a las explotaciones o beneficiarios que, de acuerdo con los baremos, superen una percepción de 200 euros.
PIDEN A LA COMUNIDAD QUE SALGA EN SU DEFENSA Y APORTE MEDIDAS DE APOYO COMO OTRAS CCAA
De igual modo, también se establece un tope en cuanto al número de cabezas de ganado subvencionables: los productores de vacas nodrizas percibirán el 100% de los importes mencionados para las 250 primeras vacas, y un 50% de los mismos desde la 251 hasta la totalidad de su censo. Para los productores de leche de vaca se establece un máximo de 725 animales subvencionables por beneficiario.
Los productores de ovejas y cabras percibirán el 100% de los importes respectivos para los primeros 2.000 animales, y el 50% de los mismos para el resto de sus animales elegibles.
De igual forma, esta consideración hacia la ganadería de la Comunidad de Madrid despierta una honda preocupación con respecto a los derroteros que puedan tomar la distribución de las ayudas en la agricultura, especialmente los cultivos de cereal.
“Existe una partida económica de 276 millones de euros destinada al agro, pero todavía no se ha desarrollado cómo será su distribución y es importante que este punto se pueda resolver cuanto antes. Esperamos que se tenga mucha más consideración con la agricultura, porque esta campaña se ha sembrado muy caro y se va recoger, el que pueda, lo mínimo. La de esta campaña es la siembra más cara de la historia. Esperamos que la Comunidad de Madrid salga en apoyos de los agricultores y ganaderos con la implementación de nuevas ayudas, porque la situación es catastrófica. Tanto en Castilla-La Mancha como en Extremadura se han sacado partidas específicas por valor de 30 millones de euros”.