Cooperativas Agro-alimentarias de España (CAE) ha remitido una carta a la ministra de Trabajo y Economía Social, Yolanda Diaz, solicitando aclaraciones y explicaciones sobre las noticias recientemente aparecidas en las que se afirma que el Ministerio ha lanzado una campaña de inspecciones extraordinarias en el sector agrario, con las que busca casos de explotación laboral, entre los que habla incluso de casos de esclavitud.
CAE rechaza y lamenta profundamente esta actuación, «ya que los casos, si es que existen, se pueden inspeccionar, perseguir y sancionar, sin extender la sospecha sobre el conjunto del sector. Puede que, por desgracia, haya delincuentes que operen en el sector agroalimentario, y con estos hay que actuar con el máximo rigor, porque además del propio delito laboral, si es el caso, compiten deslealmente con todos los demás agricultores y ganaderos que cumplen estrictamente la legalidad laboral y el resto de normativa que regula la producción agraria en España».
Cooperativas Agro-alimentarias de España recuerda a la ministra que el sector agroalimentario es uno de los que no ha parado durante la pandemia, para abastecer de alimentos a los consumidores, y que «este tipo de publicidad lo único que genera es desconfianza entre la sociedad». Además, estas informaciones repercuten muy negativamente en la imagen exterior de un sector calificado como estratégico, que es netamente exportador y emplea a miles de personas.
Como Organización «no nos oponemos a las inspecciones, ya que creemos que todos debemos cumplir la ley. Las cooperativas, como entidades de Economía social, mantienen unas condiciones laborales dignas para todos sus trabajadores, y por ello solicitamos a la ministra, Yolanda Díaz que aclare el objetivo de esta campaña, y en su caso, rectifique y corrija el enfoque de la aludida campaña de inspección».
Unas manifestaciones desafortunadas
El presidente de Cooperatives Agro-alimentàries de la Comunitat Valenciana, Cirilo Arnandis, ha considerado que «las declaraciones de la ministra son muy desafortunadas, y demuestran un desconocimiento de nuestro sector que proyecta una imagen muy dañina que no se corresponde con la realidad». Asimismo, ha recordado que «tan importante es aquello que se dice como la forma de hacerlo, y desde luego las manifestaciones de Díaz no han sido las apropiadas».
A su juicio, «Díaz debería ser defensora y valedora del carácter ejemplar del sector agrario español, de su capacidad para generar y mantener empleo, de su aportación al conjunto de la sociedad, y no ejercer de dedo acusador sin pruebas ni fundamentos». El presidente de Federació ha insistido en que «no se puede anunciar a bombo y platillo la necesidad de una campaña de inspecciones extraordinarias y poner con ello en tela de juicio el buen hacer de nuestros agricultores».
Por su parte, FEPEX considera que las inspecciones extraordinarias que el Ministerio de Trabajo ha puesto en marcha para los meses de mayo y junio en el sector agrario, y en concreto el cuestionario para los inspectores en los que se insta a investigar violencia física, verbal o amenazas, reflejan «una visión muy negativa de este sector por parte de los responsables de este Ministerio, que no es real, causando un grave daño reputacional y perjudicando su imagen en el exterior y ante la sociedad española».
FEPEX rechaza este tipo de comunicaciones que ponen en cuestión a todos los productores y empresas y dañan su imagen exterior, que es de trascendental importancia para sectores como el hortofrutícola, que exporta 2/3 de la producción nacional y que vende en los mercados más exigentes de Europa como Reino Unido, Alemania o Francia.
«El sector cumple en su inmensa mayoría con la legislación nacional en todos los ámbitos y, además, con los protocolos de calidad adicionales exigidos por las principales cadenas de distribución europeas, como es el caso de GLOBAGAP, que incluye el módulo Grasp, un apartado específico sobre medidas sociales y laborales».
Del mismo modo FEPEX rechaza cualquier actuación individual que suponga no respetar la legislación laboral y nacional y apoya la labor investigadora del Ministerio de Trabajo y Economía Social, «pero no se pueden extrapolar actuaciones puntuales al conjunto del sector, magnificando además esas actuaciones, si es que existieran».
Por ello, FEPEX considera que la ministra de Trabajo y Economía Social «debería aclarar y en su caso rectificar, para no empañar la imagen del sector agrario, que, además, ha destacado por mantener la actividad productiva y comercial en los dos meses que llevamos en Estado de alarma en España, así como en los mercados exteriores de los que depende su sostenibilidad económica y social».
Las inspecciones son muy necesarias. En todos los ordenes de la vida, urbanismo, medio ambiente, agricultura, ejercitos, fuerzas de seguridad…..Sin buenas inspecciones la corrupción campea como vemos por España, donde el que mas tiene mas protesta y mas roba a todo el conjunto de la sociedad.
Pero con la judicatura que tenemos a la trena van los pobres y a los otros se les pasan los plazos.
Saludos y a ver si nos europeizamos en lo bueno, que no veas la fama que tenemos de chanchulleros y mangutas.
Totalmente cierto…vamos bastante por detrás en Europa en diversos aspectos incluyendo este…si alguna vez vinieron inspectores al campo fue para barrerles los cortijos y lavarle su mercedes
Esta señora esta preparando el terreno, para hacer con el campo lo que les gusta hacer a los de su ideología. El que no entienda lo que digo, que lea la Historia de España.