UPA-UCE ha culpado a su asesor, Miguel Apolo, de ser el único culpable de la supuesta trama de financiación ilegal de esta organización agraria a través de las ayudas europeas al asesoramiento agrario. al reconocer en sede judicial que se habría apropiado irregularmente de 400.000 euros de los agricultores, según publicó hoy.es.
En un comunicado, UPA-UCE se apoya en la información que publicó el diario sobre las declaraciones ante el juez de los primeros detenidos en la llamada operación «Tellus» para realizar esta afirmación y pedir la puesta en libertad de sus dirigentes Ignacio Huertas y Maximiano Alcón.
Huertas y Alcón permanecen en prisión desde primeros de noviembre, cuando la jueza instructora del caso detuvo a siete personas relacionadas con la organización agraria por supuestos delitos de falsedad documental, blanqueo de capitales, contra la Hacienda Pública y pertenencia a organización criminal, dentro de la investigación que sigue por una supuesta trama de financiación ilegal.
UPA-UCE cree que «se debe producir un vuelco en la orientación de la investigación» y poner el libertad a sus dirigentes
Según la organización agraria, de las declaraciones de Huertas y de Alcón, así como del fue asesor de la entidad, Miguel Apolo, ante la jueza, queda demostrado que éste último «es la persona que ideó el sistema económico para la prestación de los servicios de asesoramiento» y que «fue él también quien realizaba todas las operaciones financieras tras apropiarse de las claves bancarias y las tarjetas de la organización».
A su juicio, «la información que publica el diario ‘Hoy’ debe producir un vuelco en la orientación de la investigación», con lo que «el caso UPA-UCE se convierte en el ‘caso Apolo'»
Además, considera que la declaración de un «ladrón confeso» en sede judicial, como la realizada por Miguel Apolo, «supone la total exculpación de los dirigentes y trabajadores de UPA de todos los delitos de los que se les acusa».
Para la organización agraria, queda claro que «el supuesto ‘entramado financiero’ fue diseñado por quien tenía conocimientos para hacerlo y fue también esa misma persona (Miguel Apolo), quien lo gestionó durante todos los años realizando los movimientos de las cuentas corrientes gracias a la confianza que los dirigentes de UPA-UCE depositaron en él».
«Miguel Apolo actuó delictivamente contra UPA-UCE durante muchos años y ello a pesar de las exigencias expresadas en todo momento por los dirigentes de la organización de que cualquier modelo que se pusiera en marcha para la prestación de servicios debía ser ante todo legal», añade la Unión de Pequeños Agricultores.
Es más, la organización agraria señala que las revelaciones periodísticas del diario «Hoy» «ponen de manifiesto la nula responsabilidad delictiva de los dirigentes y trabajadores de UPA, acusados en estos momentos por conclusiones erróneas de la instrucción realizada por la Guardia Civil que han sido asumidas sin objeción alguna por el fiscal y la jueza del caso».
Por ello, UPA-UCE expresa su absoluta sorpresa y dice no entender «cómo un delincuente confeso ante el fiscal y la juez permanece en libertad sin cargos», mientras Huertas y Alcón siguen en prisión.