EFE.- "Los transgénicos son para mí una guerra a nivel genético. Es una guerra contra la tierra, la biodiversidad y los agricultores porque esta creación solo puede venir con una estructura totalitaria que no permite a los agricultores usar sus semillas", declaró Shiva en una conferencia de prensa.
Shiva se encuentra en Costa Rica en el marco de la celebración de la campaña costarricense "Pura vida sin transgénicos", una iniciativa de grupos ecologistas que ha logrado declarar libre de cultivos transgénicos al 86 % del territorio costarricense.
"En esta tierra de diversidad los monocultivos son una declaración de guerra", agregó la activista en Costa Rica, donde realiza una visita que incluye una charla magistral y giras a campos agrícolas.
En una de sus visitas a zonas agrícolas del país Shiva conoció a Claudia, una agricultora orgánica en la provincia de Limón (Caribe).
La activista comentó que Claudia tiene que esperar que le lleven agua, ya que a la que tiene acceso está contaminada con los agroquímicos que se usan en las plantaciones de piña.
Según la física, los monocultivos "destruyen la habilidad de los ecosistemas y de la naturaleza de cumplir con sus funciones de mantener un balance con las pestes, de polinizar y de limpiar el agua".
En India, dijo la activista, la empresa Monsanto "introdujo la modificación genética del algodón y violaron todas las leyes del país".
"Ahora dicen que el hecho de que el 95 % de la semilla de algodón plantada en India sea de Monsanto es porque los agricultores así lo decidieron. Pero la realidad es que la única semilla de algodón que se vende es la de Monsanto, los agricultores no tienen otra alternativa", explicó Shiva.
Recalcó que "ambos, la agricultura industrial y los transgénicos, están basados en una mentalidad de guerra".
Según la ecologista, con la llegada de los transgénicos a pueblos de la India fue subiendo paulatinamente la tasa de suicidios hasta un 3.000 % entre 2002 y 2008, relación que ha sido rechazada por Monsanto a nivel internacional.
"Los suicidios están relacionados a las semillas por las deudas que adquieren los agricultores y por los pesticidas", afirmó Shiva.
Agregó que los transgénicos son "una gran parte del negocio de los pesticidas" que en la India "le han robado la tierra a más de 284.000 agricultores".
"Está claro que hoy la humanidad tiene que tomar una decisión entre la guerra y la paz. Entre los monocultivos y la biodiversidad. Entre los transgénicos y la agricultura ecológica. Entre desiertos verdes usando venenos y zonas de agricultura llenas de biodiversidad produciendo comida de verdad", advirtió.
Shiva, física de profesión, activista ambientalista y líder del movimiento "ecofeminista", es también precursora de la organización en favor de una agricultura sostenible Navdanya Trust, que ha movilizado a más de 10 millones de agricultores en la India en defensa de su derecho sobre la conservación de las semillas.
La activista saltó a la fama en los años 70 al impedir con sus abrazos a los árboles, junto a otros cientos de mujeres del movimiento Chipko, que significa abrazo en hindi, que continuara la tala indiscriminada de bosques en su país.