EFE.- García, en declaraciones a EFE, ha valorado el esfuerzo de la Xunta por conservar los puestos de trabajo en la planta de Clesa en Caldas de Reis, cuyo ERE de extinción ha quedado en suspenso al negociarse su venta a dos grupos, pero ha echado de menos respaldo institucional para impulsar un "modelo unitario" del sector lácteo gallego.
Ha abundado en que la problemática de la filial de Nueva Rumasa "solo se está viendo desde un perfil meramente economicista y laboral", cuando se le antoja imprescindible "darle volumen" al proyecto para que pueda "tener futuro".
"El tamaño industrial es indispensable para tener viabilidad", ha insistido García, para quien, "además de poner leche en un cartón, muchas veces de fuera", se debe aportar "valor añadido" como lo viene haciendo la planta de Clesa en Caldas al hacer "postres de cuchara, leche en polvo y queso".
García ha recordado que cada vez que una empresa láctea gallega tuvo problemas, el Gobierno facilitó su venta a marcas foráneas, y ha mostrado su temor de que se vuelva a dar la misma situación ahora con Clesa.