La Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos de Castilla-La Mancha ha presentado ante la Dirección Provincial de Agricultura, Medio Ambiente y Desarrollo Rural de Ciudad Real una solicitud al respecto del Estudio de impacto ambiental sobre explotación de minería de tierras raras en Matamulas. A través de este escrito se apoya la iniciativa del movimiento contra las tierras raras en relación con los proyectos de concesión de explotación iniciados, para dictar la caducidad de los mismos.
Desde UPA Castilla-La Mancha ya se denunció esta situación debido a la polémica que estaba suscitando la extracción minera de monacita en la región, una controversia que afecta de manera directa a los municipios de Torrenueva y Torre de Juan Abad de la comarca de Campo de Montiel.
Sin tener en cuenta otras consideraciones, UPA Castilla-La Mancha recuerda que las partículas contaminantes emitidas a la atmósfera derivada de los diferentes trabajos de movimiento de tierras, transportes por zonas sin pavimentar podrían ser muy graves, así como la contaminación acústica derivada. Pero, además, el impacto sería directo sobre los productos agroalimentarios de la comarca por las emisiones y la manera en que afectaría a los recursos hídricos.
A UPA en la región le preocupa el riesgo de contaminación de las aguas por el almacenaje, con el riesgo que implica tanto para los cultivos de la zona como para los propios habitantes de la zona. De ahí que se haya apoyado esta iniciativa para proceder a la declaración de inadmisibilidad de la documentación presentada por el promotor en relación con los proyectos de concesión de explotación iniciados, y en consecuencia, dictar la caducidad de los mismos y el archivo.