EFE.- UP ha recordado que es competencia de los municipios velar por que los productos que se venden en las ferias y mercados cumplan con las normas de etiquetado y que estos productos provengan de la artesanía alimentaria en los casos donde esto sea un requerimiento indispensable para poder participar.
Los ayuntamientos también pueden, según el sindicato, jugar un papel activo en la promoción de productos de calidad del municipio y en la potenciación de mercados de venta directa, siendo a la vez proactivos a la hora de denunciar las malas prácticas de la distribución.
UP pide también a los ayuntamientos catalanes que colaboren para facilitar la adecuación de las explotaciones ganaderas a la nueva normativa de bienestar animal, con el objetivo de que la posible interpretación que se haga de ésta no suponga un nuevo problema para los profesionales.
El plazo para la adecuación a la normativa comunitaria de bienestar animal en el caso de las gallinas ponedoras acaba el 31 de diciembre de este año, y en el caso del porcino, el 31 de diciembre de 2012.
Estas normas establecen la superficie que necesita cada animal y puede suponer un incremento de entre un 20 y un 30% de la superficie actual.