Los primeros trabajos se pondrán en marcha el 1 de junio y se desarrollarán a lo largo de los siguientes treinta meses, hasta noviembre de 2016.
El estudio ‘Citric Waste Integrated Management-Ecocitric’ pretende dar una solución viable y competitiva a los problemas que generan los restos de poda citrícolas.
Un ahorro para el agricultor y menor riesgo de incendios
La mayoría de los agricultores queman o trituran la leña en las explotaciones, por lo que su recogida y gestión no sólo supondría un ahorro económico para el citricultor, sino que además minimizaría el riesgo de incendios, la liberación de dióxido de carbono a la atmósfera y la aparición de hongos en la leña esparcida sobre el terreno.
Tras el estudio previo y la ordenación de campos, se construirá una planta piloto de tratamiento donde se llevarán a cabo pruebas reales en los distintos mercados potenciales y se realizarán acuerdos de intención de compra con potenciales clientes.
El programa efectuará un seguimiento exhaustivo de todos los residuos gestionados y de los impactos ambientales que se van a evitar, especialmente en lo referente a las emisiones de gases de efecto invernadero.
El objetivo es alcanzar la transformación de hasta 100 toneladas de restos de poda en explotaciones citrícolas situadas en el término de la Vall d’Uixò, pero los organizadores aspiran a extender dicha gestión de residuos al resto del sector citrícola valenciano.
(Foto: Archivo www.vidarural.es)