Un programa puesto en marcha por la Diputación de Sevilla hace 20 años ha conseguido recuperar la oveja Churra Lebrijana, raza autóctona y patrimonio ganadero de la provincia de Sevilla, de la que actualmente ya hay más de 300 ejemplares.
En un comunicado, el diputado provincial de Servicios Públicos Supramunicipales, Gonzalo Domínguez, ha explicado que se ha podido así recuperar una raza que estuvo al borde de la extinción, «y hoy está más que estabilizada».
A los ejemplares que se han conseguido se une que hay una asociación de ámbito nacional que impulsa su difusión por todo el territorio.
Desde el Área de Servicios Públicos Supramunicipales se ha puesto en marcha una campaña de apadrinamiento de la oveja Churra Lebrijana, una iniciativa educativa y participativa, que acerca a la ciudadanía a la conservación del patrimonio rural y de la que la ciudadanía se puede hacer partícipe en #ApadrinaUnaChurra.
Una buena parte de la población de esta especie se mantiene en el Monte San Antonio, un espacio natural de 386 hectáreas ubicado en el término municipal de Cazalla de la Sierra e integrado en el entorno del Parque Natural Sierra Morena de Sevilla, que constituye el patrimonio forestal de la Diputación de Sevilla.
Fue adquirido por la Institución provincial en 1939, cuando era un monte público desarbolado, con el objetivo de repoblarlo forestalmente y ofrecer una línea de empleo ligado a los aprovechamientos naturales.
Se trata de un espacio con vegetación constituida por formaciones arboladas densas de alcornoques y encinas, que se acompañan de matorral y pastizal mediterráneo, con dos emblases y una red de caminos de 14 kilómetros.
En cuanto a su fauna salvaje, principalmente está integrada por cérvidos e ictiofauna que incluye barbos, bogas, carpas de espejo y carpa común, angula o trucha arco iris.