La presidenta nacional de AFAMMER, Carmen Quintanilla, ha presentado este martes 15 algunos de los datos más importantes del Programa de Asesoramiento y Prevención de la Violencia contra la Mujer en el Medio Rural, que está desarrollando a lo largo de este año esta organización no gubernamental financiado por el Ministerio de Sanidad, Servicio Sociales e Igualdad. Un programa con el que AFAMMER, según ha afirmado su presidenta, ha llegado a más de 16.000 personas en toda España con el objetivo de acabar con la violencia a las mujeres rurales.
Quintanilla, que ha estado acompañada en la rueda de prensa por la presidenta de AFAMMER-Almagro, Ana Isabel Fernández y de la técnico del programa, Mariola Gallardo, ha destacado que el programa se está desarrollando a través de tres herramientas o pilares. La primera de ellas es la realización de un total de 18 charlas formativas e informativas en varias comunidades autónomas: Andalucía, Aragón, Cantabria, Castilla-La Mancha, Comunidad Valenciana y La Rioja, a las que han asistido 392 personas, de las que 83 eran hombres, lo que demuestra un avance en la implicación de toda la sociedad en la lucha contra la violencia de género y en las que AFAMMER ha contado con la colaboración de profesionales expertos y miembros de las unidades de mujer y menor de la Policía Nacional y de la Guardia Civil.
Varias de las charlas, ha añadido la presidenta nacional de AFAMMER, se han dirigido a los más jóvenes, en institutos, con el fin de ofrecerles la información necesaria para que visualicen y reconozcan las manifestaciones más frecuentes de violencia en jóvenes y las nuevas formas de violencia que se generan a través de las redes sociales.
El segundo pilar del programa, tal y como ha señalado Carmen Quintanilla, es la campaña de comunicación dirigida a sensibilizar y concienciar a la sociedad rural de luxchar contra la violencia a las mujeres rurales. Dentro de esta campaña, según ha explicado, se han diseñado y editado 7.500 dípticos en español y 1.500 en inglés en los que se da a conocer la Estrategia Nacional para la Erradicación de la Violencia de Género y se informa a las mujeres del medio rural de los recursos con los que cuentan las víctimas de violencia de género y a dónde pueden dirigirse para pedir ayuda.
AFAMMER tedrá un Servicio de Asesoramiento Gratuito específico a mujeres del medio rural en materia de violencia de género
Asimismo, se han enviado 1.226 cartas a ayuntamientos de toda España de entre 1.000 y 3.000 habitantes, correspondientes a zonas rurales, dando a conocer este programa, además de darle también amplia difusión a través de las redes sociales: facebook y twitter.
También se han diseñado y editado 2.000 dípticos con motivo del Día Internacional para la Erradicación de la Violencia contra la Mujer que se celebrará el próximo 25 de noviembre, fecha en torno a la que la presidenta nacional de AFAMMER anunció además otros dos actos: la entrega de un cheque a la Fundación Ana Bella y el acto que, como viene siendo ya tradicional, realiza todos los años con alumnos de colegios de Ciudad Real dirigido a promover la igualdad y prevenir la violencia desde la niñez y la adolescencia.
Por último, Carmen Quintanilla, se ha referido a la tercera herramienta incluida en el programa contra la violencia a las mujeres rurales, como es la puesta en marcha en la sede nacional así como en las delegaciones de AFAMMER en toda España de un Servicio de Asesoramiento Gratuito específico a mujeres del medio rural en materia de violencia de género, al que se puede acceder de forma presencial, en el caso de la sede nacional en la C/ Montesa, 9 de Ciudad Real o bien por teléfono, en el 926 23 27 98 o correo electrónico a través de la dirección mariola@afammer.es.
La presidenta nacional de AFAMMER ha recordado que desde la creación de esta organización no gubernamental, en 1982, “trabajamos por sensibilizar, concienciar y prevenir la violencia de género en el medio rural y luchamos para acabar con el silencio que rodea a las víctimas de violencia en este entorno”. Del mismo modo, ha reivindicado de nuevo la necesidad de que las estadísticas reflejen, de forma desagregada, a las víctimas de violencia de género en función de si viven en el mundo urbano o en el medio rural “porque esa sería la única forma de poner en marcha medidas específicas para luchar contra la violencia en el medio rural”.