ASAJA Córdoba ha solicitado al Ministerio de Hacienda que publique la rebaja fiscal para el sector agrario antes para que los productores puedan presentar su ejercicio fiscal teniendo en cuenta la rebaja prevista, toda vez que desde el pasado día 11 de abril y hasta el próximo 30 de junio los agricultores y ganaderos ya pueden presentar su declaración de la renta.
El presidente de Asaja Córdoba, Ignacio Fernández de Mesa, ha informado de que las actividades agrarias y el sector ganadero sufrieron fuertes descensos en sus rendimientos durante el año 2022 motivados por la sequía y la subida de los costes de la energía, el gasóleo y fertilizantes.
En cereales y leguminosas, los rendimientos no fueron nada buenos debido a las nulas precipitaciones otoñales e invernales, por lo que Asaja Córdoba pide una reducción del coeficiente al 0,12. En el girasol, la falta de reservas de agua y las altas temperaturas primaverales hicieron que fuera uno de “los peores años que se recuerda”, ya que a pesar de tener más superficie que los últimos años, la producción final fue menor que todos los anteriores, llegando muchas parcelas a no cosecharse y, por tanto, no cubriendo los costes de producción. Por ello, Asaja pide también una reducción al 0,12.
En el caso de la viña, finalizó la vendimia en la zona de la Denominación de Origen Protegida (DOP) Montilla-Moriles con la cosecha de uva más baja de su historia. La producción final tuvo una merma de un 45% menos que lo registrado en un año normal, por lo que la organización agraria solicita una reducción al 0,15.
Para el algodón, “la situación no fue mejor” y, a consecuencia de la sequía, las anormales altas temperaturas alcanzadas en otoño y las limitaciones en el riego, el rendimiento medio disminuyó en un 30% y la producción total en Córdoba cayó un 42%. Por ello, se solicita también una reducción al 0,15.
En el olivar, Asaja justifica la bajada de los módulos al 0,10 por la escasa producción de aceituna en la provincia, debida a la grave sequía que ha afectado a este cultivo de manera muy notable.
Asimismo, el año 2022 se caracterizó por una merma de producción en los cítricos debido a la falta de precipitaciones y las restricciones en los riegos, lo que conllevó una disminución general de los calibres de todas las variedades, pero, sobre todo, por unos precios muy inferiores a los del año pasado, en el peor año que se recuerda. De este modo, solicita una reducción del coeficiente al 0,00.
Para el almendro, se pide una reducción al 0,18 porque, debido a las escasas precipitaciones de primavera, los meses de marzo y abril fueron muy perjudiciales por las escasas lluvias, siendo afectadas en su producción muchas superficies, principalmente de secano, que se vieron forzadas para llegar a final de ciclo.
La sequía, al igual que al resto de producciones, también ha afectado al ajo, sobre todo por las limitaciones en los riegos al verse reducida la cantidad de agua disponible. Ello repercutió en el tamaño y calidad del fruto. Suponiendo para este cultivo una siniestralidad en torno al 26%, por lo que Asaja considera que sería apropiado rebajar el coeficiente al 0,20.
CRISIS EN GANADERÍA
Por otro lado, el sector ganadero se encuentra “en una crisis de rentabilidad” de la actividad, manifestada en bajo coste de los precios en origen e incremento en los costes de producción, sobre todo por el elevado coste de los piensos y el coste adicional de abastecimiento externo de agua y energía a las explotaciones ganaderas.
Las precipitaciones en otoño fueron muy escasas y la sequía extrema está mermando la rentabilidad de las explotaciones ganaderas. La situación es muy grave en vacuno de leche, bovino-ovino-caprino de carne y porcino ibérico, por ello todo lo que no sea aplicar índice 0 en los módulos no sería real, “ya que la mayor parte del año los ganaderos han vendido muy por debajo de costes, dejando las explotaciones en difícil situación”.
El campo seguramente que está en la peor situación de la historia, si no se Dan de cuenta los q nos maladministran nos vamos a la puta ruina
Para más inri una sequía catastrofica