"La ciudad tomará medidas efectivas y contundentes para prevenir y controlar la enfermedad y asegurarnos de que estamos protegidos con eficacia contra una (posible) epidemia", declaró el director de la Oficina de Sanidad de Shanghái, Xu Jianguang.
Shanghái ha prohibido la venta de aves acuáticas vivas en sus mercados, y lleva a cabo inspecciones en centros mayoristas de venta de carne y en restaurantes, a la vez que recomienda a la población local asegurarse de que la carne que se consuma está adecuadamente cocinada para eliminar la posible presencia de virus.
La cepa H7N9, que toma ese nombre técnico como descripción de la estructura de las proteínas de su superficie, no estaba considerada susceptible de afectar a los seres humanos hasta el anuncio de las dos muertes, en Shanghái el domingo, por lo que aún ha sido poco estudiada y no existen vacunas para combatirla.
Los dos muertos hasta la fecha por este virus eran vecinos del distrito suburbano de Minhang, parcialmente rural, y los dos fueron tratados en el Hospital Popular Número 5 de Shanghái, pero no tenían ninguna otra conexión entre ellos, aseguró Xu.
"Por ahora no sabemos si se trata de humanos contagiados con una gripe aviar o si el virus ha mutado en virus humano con la capacidad de contagiarse entre humanos", reconoció por su parte la directora del Centro de Prevención y Control de Epidemias de Shanghai, Wu Fan.
"Es un nuevo virus menos conocido, y por ahora no sabemos su origen ni su animal portador", añadió, pero aclaró que "por ahora, todos los que han tenido contacto estrecho con los dos fallecidos (46 personas) han terminado su cuarentena de dos semanas de observación sin salir de casa, y ninguno tuvo síntomas de gripe".
En los cuatro casos desvelados, las víctimas se encuentran ya en estado crítico y bajo tratamiento de emergencia.
Las nuevas víctimas son tres mujeres, una de ellas de 45 años, en la capital provincial de Jiangsu, Nankín, otra de 48, en Suqian, y una tercera, de 32, en Wuxi, así como un hombre de 83, en Suzhou.
A ellas se suma el caso que ya se conocía de otra mujer de 35 años, también en estado crítico, y a la que se había dado el martes erróneamente por fallecida, en la ciudad de Chuzhou (Anhui), cercana a Nankín, donde está ingresada la víctima.