El SESVanderHave abre un nuevo centro de investigación de remolacha, con una inversión de 20 millones de euros que apuesta por la investigación de remolacha azucarera 2.0 en un momento crucial para el sector ante la desapariciñon de las cuotas en 2017.
Rob Van Tetering, CEO de SESVANDERHAVE, explica por qué el SVIC es tan importante para la empresa: «Agricultores en más de cincuenta países desde Rusia a América cultivan nuestras semillas. Esta distribución geográfica concierne nuestras variedades de
remolacha azucarera. Nos referimos a diferencias de clima, suelo y enfermedades. En el SVIC podemos analizar todos estos factores en sus mínimos detalles y simultáneamente
ofrecer una solución personalizada. Además, independientemente del tiempo o la estación, realizamos un control independiente de clima en cada compartimento».
Esto consigue un crecimiento más homogéneo de nuestras jóvenes plantas ya que no son perturbadas por los imprevistos del tiempo. «Todas las nuevas tecnologías aplicadas en el SVIC permiten un estudio aún más rápido en plantas aún más jóvenes: por consiguiente, podemos desarrollar nuevas variedades casi dos veces más rápido, lo que supone una enorme diferencia».
El tamaño del SVIC equivale a cuatro campos de fútbol, dispone de 13.000 m2 de invernaderos y casi 2000 m2 de laboratorios. Además, alberga varios departamentos de investigación, como el departamento obtentor y el laboratorio de investigación fitopatológica. Gerhard Steinrücken, Director de R&D dice, «estos son los departamentos que necesitan la mayor parte de espacio, porque muchas jóvenes plantas tienen que ser investigadas en un invernadero de clima controlado. Por eso todo el complejo de edificios es tan grande. En ambos casos los equipos llevarán a cabo más del triple de pruebas. Esto será una ventaja más para el trabajo de investigación: Cuantas más plantas podamos investigar, de mayor calidad serán los resultados.
Investigación de remolacha 2.0 ante el final de las cuotas en 2017
Para Gerhard Steinrücken: «El SVIC ofrece no otra cosa que tecnología de primera clase bajo cristal. Este es uno de los invernaderos más innovadores en nuestra industria. Una parte significativa de esta inversión, por lo tanto, se reserva para los últimos métodos de investigación de alta tecnología. La automatización de diferentes procesos nos permite
trabajar más rápido, y la innovación biotecnológica nos permite, incluso, realizar un análisis completo de ADN de remolacha. Esto es investigación de remolacha azucarera 2.0».
La tecnología de primera clase y la ecología van de la mano El SVIC también representa sofisticadas estrategias sostenibles. «Puedo demostrar esto mediante algunas cifras
impresionantes.», dice el CEO van Tetering. «El SVIC recoge más de 8 millones de litros del agua de lluvia, que podemos reutilizar para regar nuestras plantas. Usamos lámparas LED que son un 400% más económicas que las lámparas existentes. Además, tenemos gran cuidado de que nuestros invernaderos no causen muchas molestias a aquellos que trabajan y viven a nuestro alrededor: nuestras pantallas black‐out reducen la contaminación lumínica a un mínimo absoluto.»
SESVanderHave puede perfeccionar más su investigación gracias a este complejo de edificios de alta tecnología. Van Tetering: «El Centro de Innovación SESVANDERHAVE es crítico para nuestra empresa y la industria azucarera. Esto nos permitirá poner en el mercado nuevas y mejores variedades más rápidamente, como por ejemplo remolacha azucarera que den una producción más alta, que sean más resistentes a enfermedades y menos dependientes de pesticidas. Esto demuestra que SESVANDERHAVE cree en la remolacha azucarera, a pesar de la pendiente abolición de la cuotas, prevista en 2017».
(Fotos Steven Massart)