WWF.-La Conferencia sobre cambio climático en Panamá es la última oportunidad para que los líderes mundiales diseñen un programa ambicioso de cara a la cumbre climática de las Naciones Unidas – COP17 – que se celebrará en Durban, Sudáfrica, del 28 de noviembre al 9 de diciembre.
La reunión de Panamá, que tendrá lugar del 1 al 7 de octubre, es crucial para la Cumbre de Durban. Los negociadores en Panamá deben llegar a acuerdos para que los dirigentes políticos tomen una acción global contra el cambio climático.
Según Mar Asunción, Responsable del Programa de Cambio Climático de WWF España, “Es necesario que los delegados mundiales lleguen a Panamá dispuestos a trabajar duro y asegurarse de que no se pierda tiempo en Durban con mezquinas disputas políticas. Un progreso significativo daría la oportunidad de que los negociadores aborden en Durban el problema del cambio climático, posibilitando así un futuro sostenible con suficiente comida, agua y energía para todos”.
La organización recuerda que los resultados de la Cumbre del clima de Durban nos pueden poner en la dirección correcta para evitar las peores consecuencias del cambio climático, para las personas y los ecosistemas.
En concreto, WWF pide que los gobiernos en Durban acuerden un mecanismo para establecer un precio a la contaminación del carbono proveniente del transporte marítimo internacional, cuyas emisiones de CO2 no están reglamentadas y equivalen a las de toda Alemania. Esto ayudaría a reducir las emisiones de carbono globales y contribuiría a pagar por los impactos del cambio climático que están afectando desproporcionadamente a los países en desarrollo.
“En Durban los negociadores también deben renovar el compromiso del Protocolo de Kioto, ya que no es el momento de dar pasos atrás, sino de sumar esfuerzos de todas las herramientas con que contamos para
combatir el cambio climático”, concluye Asunción.
LAS CUESTIONES CLAVE EN PANAMÁ:
Para lograr un resultado exitoso en Durban, los delegados para las negociaciones sobre el clima en Panamá deben avanzar en lo siguiente:
• Un segundo período de compromiso del Protocolo de Kioto, actualmente el único marco mundial para la reducción de las emisiones, así como establecer el escenario para que Durban obtenga un amplio tratado jurídicamente vinculante para todas las partes en el futuro.
• Consenso en torno al proceso y principios para aprovechar los ingresos procedentes del transporte marítimo de comercio internacional para que los países en desarrollo puedan afrontar los costes del cambio climático como son: mayor sequía, inundaciones y la elevación del nivel del mar.
• Un compromiso que incluya el objetivo de reducir las emisiones globales en 80% para el año 2050 en relación a los niveles de los años 1990.
• Directrices para una transparencia Medible, Reportable y Verificable (MRV) para la reducción de las emisiones y los compromisos financieros a fin de generar confianza entre los países desarrollados y en desarrollo.
• Cerrar la brecha entre los compromisos financieros asumidos y fondos distribuidos hasta ahora para reducir las emisiones de la deforestación y la degradación (REDD +).
• Acuerdo sobre la composición y el reglamento del Comité de Adaptación, que fue encomendado en el acuerdo de Cancún el año pasado, pero sin avances significativos.