La Asociación Empresarial para la Protección de las Planta (Aepla) ha valorado la decisión de la Agencia Europea de Sustancias y Mezclas Químicas de mantener la actual clasificación del glifosato, porque las pruebas científicas no cumplen los criterios para clasificarlo como carcinógeno. Por eso, al igual que la organización de productores europeo Copa-Cogeca, instan a la CE a dar el visto bueno a una aprobación de 15 años para el glifosato.
En un comunicado, Aepla ha afirmado que dicha clasificación «es consecuente con las 90.000 páginas de pruebas existentes, 3.300 estudios revisados y las opiniones de la EFSA y la OMS que indican que el glifosato no es cancerígeno».
«Nos felicitamos de que haya prevalecido la evidencia científica y no la ideología, y esperamos que sirva de precedente de cara al futuro», han añadido desde la Asociación.
En este sentido, ha recordado que los fitosanitarios son «una herramienta clave para los agricultores y los usuarios en ámbitos domésticos de la Unión Europea (UE), y esto incluye a los productos que contienen glifosato.
Los productores europeos quieren que la CE retire las restricciones a su uso en toda la UE
«Ahora esperamos que la Comisión Europea acelere el proceso de registro de la sustancia en la UE y conceda una aprobación de 15 años, la misma inicialmente sugerida por la Comisión antes de que la sustancia se viera inmersa en el debate político y emocional de los últimos meses», ha añadido Aepla.
Por su parte, desde la Copa y la Cogeca su secretario General, Pekka Pesonen, ha asegurado que «con la base de la evidencia científica fuerte, frente a tantas opiniones, de la Agencia Europea de sustancias químicas (ECHA) y de la EFSA instamos a la UE a volver a autorizar esta sustancia para su uso en la producción de cultivos sin mayores restricciones». Además, recuerda que los agricultores de la EU se han caracterizado port mantener un alto nivel de competencia y preparación para aplicar con seguridad los productos de protección de plantas y controles regulares en pulverizadores.
«Además, creemos que es esencial para construir confianza en el sistema de seguridad alimentaria de Europa destacando nuestros métodos de producción de alta calidad y estándares de protección del medio ambiente, que se aplique en la UE. El glifosato es el más utilizado herbicida en la UE, lo que nos permite producir alimentos de calidad segura, asequible y de una forma rentable. Además, es una herramienta clave junto con cultivos de captura para evitar la erosión del suelo y reducir las emisiones de gases de efecto invernadero», dijo Pesonen.