Las decisiones empresariales siempre suele tener mucho sentido y más si vienen de una empresa como Leite Río.
Sin embargo, eso no quiere decir que queden en el aire cosas que, en principio, parezcan cuanto menos incomprensibles.
Para su propietario, Jesús lence, el problema de la caída el precio de la leche en origen es que hay mucha producción, pero invierte 5 millones en mejorar su sistema de envasado.
¿Para qué quiere mejorar su infraestructura si a la vez busca que baje la producción?
Quizá, pensando mal, piensa que lo que sobra es leche gallega, pero no otra procedente de fuera que pueda ser más barata.