La Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE) ha concluido las actuaciones de control de caracol manzana en el tramo del río Ebro comprendido entre Tortosa y Miravet (Tarragona) previstas para este año.

La campaña de control y vigilancia, realizada de mayo a octubre, ha finalizado con la retirada en el entorno de Tortosa de 461 ejemplares adultos del caracol manzana y 2.210 puestas recogidas.

En Miravet no se ha detectado presencia de la especie durante toda la campaña, por lo que, según señala la CHE, todas las actuaciones llevadas a cabo en este foco los dos años anteriores han sido efectivas y pueden haber acabado con el origen.

Aún así, continuarán las tareas de vigilancia en 2020 para garantizar la efectividad de estas actuaciones.

la especie está aumentando su zona de colonización

En Tortosa, la barrera de ribera ejecutada a modo de «cortafuegos» entre el puente del Estado y el puente del Milenario, así como la eliminación de vegetación tanto terrestre como acuática, han evitado el avance de la especie aguas arriba del límite actual (situado entre el puente del Milenario y el puente del Ferrocarril).

Durante los años 2017, 2018, 2019 y el próximo 2020, el Ministerio para la Transición Ecológica destinará algo más de 530.000 euros para la realización de trabajos de control de la plaga.

En Tortosa, en zona de Dominio Público Marítimo Terrestre, la CHE lleva trabajando desde el año 2014 para colaborar con el control de esta especie invasora y como medida preventiva para reducir el riesgo de introducción en el Dominio Público Hidráulico.

En Miravet (ámbito competencial de la CHE), los trabajos de control comenzaron en 2017, al detectarse en la zona un foco puntual, y tras todos los esfuerzos invertidos estos años, en 2019 no se ha detectado presencia de la especie.

Por otra parte, este año se ha seguido constatando la presencia de otra especie invasora, el cangrejo azul (Callinectes sapidus).

Durante el desarrollo de los trabajos para el control del caracol manzana se ha podido comprobar que la especie está aumentando su zona de colonización y que continúa incidiendo en la población de caracol manzana, así como en el resto de especies con las que compite en el ecosistema fluvial.

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