En la inauguración de la XV jornada técnica de la Federación de regantes Fenacore sobre la "Importancia del Regadío en la nueva Planificación Hidrológica", Ardiles ha solicitado a los agricultores "colaboración y comprensión" para completar este año el ciclo de planificación hidrológica y abordar la próxima revisión de los planes de cuenca, que tendrá que estar finalizada antes de 2015.
En su intervención en este foro, ha resaltado el "firme compromiso" del Gobierno por alcanzar "un gran acto nacional del agua que permita aprobar un nuevo Plan Hidrológico Nacional (PHN), recoge el Ministerio de Agricultura en un comunicado.
Antes, a lo largo de este año, deberán aprobarse los planes hidrológicos de todas las cuencas competencia del Estado (intercomunitarias), según ha puntualizado la directora general.
"Ya estamos dando los pasos necesarios, a pesar de la mucha tarea pendiente que nos encontramos", ha afirmado Ardiles.
La directora general ha explicado que, pese al retraso acumulado de la etapa anterior, el Gobierno actual ya ha aprobado por Real Decreto cuatro nuevos planes hidrológicos y han sido informados favorablemente por el Consejo Nacional del Agua los planes de cinco demarcaciones más, dando así paso a la fase final de su aprobación.
Ha informado a los regantes de que en el próximo Consejo Nacional del Agua se abordará -y previsiblemente informará favorablemente- la propuesta de plan hidrológico de la cuenca del Duero, uno de los más importantes y complejos de España, así como de los Reales Decretos de composición de las demarcaciones de Ceuta y de Melilla.
La directora general también ha expuesto que el plan hidrológico de la cuenca del Ebro, clave en la planificación hidrológica de España, se está completando para su próxima aprobación.
Sobre este último, ha adelantado que "se abordará en el Consejo Nacional del Agua que se prevé celebrar antes del verano".
En su intervención, Ardiles dijo que el Ministerio trabaja para aunar los intereses "que en principio podrían parecer enfrentados" para asegurar el suministro de agua "en cantidad y calidad" y "velar por el mantenimiento de los ecosistemas ligados al agua" en los planes hidrológicos.
A su juicio, debe entenderse el suministro de agua "de un modo integral", es decir, "considerando tanto las necesidades de abastecimiento como de regadío".
Según recordó en el mismo comunicado, la agricultura de regadío es una de las actividades económicas con más peso en nuestro país y consume cerca del 80 % del volumen total de agua destinada al abastecimiento, ha detallado.