El IVA vuelve a aplicarse a los alimentos básicos, incluido el aceite de oliva, a partir de este martes 1 de octubre, en principio al 2% entre octubre y diciembre, para luego pasar al tipo superreducido del 4%, como estaba antes de la supresión temporal de ese impuesto en enero de 2023.
También bajó el IVA del 10 al 5% a los aceites y pastas, y desde el pasado julio lo suprimió solo para el aceite de oliva.
Además, desde mañana el aceite de oliva tendrá un IVA del 2% hasta final de año, al haber sido incluido en el grupo de alimentos de primera necesidad, mientras que los aceites de semillas y las pastas pasarán a tener un 7,5% de IVA entre octubre y diciembre.
Según datos de la Hacienda Tributaria, entre enero y julio la reducción del IVA de los alimentos ha supuesto una caída de la recaudación de 442 millones de euros.
El Gobierno ha insistido en que la progresiva vuelta a los tipos normales de IVA a los alimentos básicos responde al mandato de la Comisión Europea para ir atenuando las medidas extraordinarias que los distintos países han adoptado en los últimos años frente a la inflación.
Según el Índice de Precios de Consumo (IPC) del Instituto Nacional de Estadística (INE), los precios de los alimentos y las bebidas no alcohólicas subieron el 2,5% en agosto pasado respecto al mismo mes de 2023, lo que supone seis décimas menos frente a la tasa anual de julio y la cifra más baja desde octubre de 2021.
En general, la inflación fue del 2,3% en agosto, cinco décimas por debajo de la registrada en junio, lo que refleja una tendencia a la moderación.
Los sectores de la industria y la distribución alimentaria se han mostrado a favor de la prórroga del IVA de los alimentos durante estos meses, pese a que no se ha aplicado a otros productos de la cesta de la compra como la carne y el pescado.