La Subdirección General de Cultivos Herbáceos e Industriales, del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, ha abierto un puerta a la esperanza para hallar una solución a los graves problemas del cultivo del lúpulo con la entrada en vigor de la nueva PAC. Para ello, ha convocado para el martes 28 de febrero, en Madrid, reunión de la Mesa Sectorial del Lúpulo, para tratar sobre “la situación del cultivo del lúpulo en el nuevo periodo de la PAC”.
En representación de ASAJA asistirá el presidente de la organización en León, Arsenio García Vida. ASAJA había formulado por escrito esta petición el 6 de febrero después de comprobar que en la nueva asignación de regiones productivas por parte del Fega, al lúpulo se le encuadraba en una región de cultivos permanentes, en vez de en una región de cultivos de regadío, como estuvo siempre, lo que suponía perder fondos europeos en las ayudas del denominado pago básico y en las de los eco-regímenes.
SE CONFÍAN EN QUE SE PRESENTE UNA SOLUCIÓN SATISFACTORIA A LOS LUPELEROS DE TODA ESPAÑA
Además de solicitar esta convocatoria, ASAJA dirigió una carta al Secretario General de Agricultura, Fernando Miranda, poniendo de manifiesto estos problemas, y apuntando que lo deseable sería considerar al lúpulo como un cultivo plurianual.
En la reunión del día 28 en el Ministerio los funcionarios del departamento competente oirán a los representantes del sector, entre ellos a ASAJA como organización más representativa en la provincia, y se apuntarán las soluciones más convenientes. ASAJA conoce de forma oficiosa que se han dado instrucciones, tomadas a alto nivel, desconociendo el detalle de las mismas, para dar una solución satisfactoria a los lupuleros de toda España, y en particular a los de la provincia de León.
Cabe recordar que con la publicación provisional de las nuevas regiones para asignación de derechos, los productores están viendo cómo sus fincas de lúpulo, que antes estaban encuadradas en regiones de regadío, ahora lo están en regiones de cultivos permanentes, un cambio que supone percibir menos apoyos con la nueva ayuda denominada ayuda básica a la renta para la sostenibilidad, y menos apoyos en ayudas de los denominados eco-regímenes.