La Unión de Uniones de Agricultores y Ganaderos considera un paso en buena dirección el anuncio de fuentes del Gobierno acerca de que el Ministerio de Hacienda estaría estudiando la decisión de rebajar los módulos de IRPF a los sectores de ganadería que operan en régimen de integración.
Según las informaciones que maneja la organización, la reducción de módulos implicaría pasar de un índice del 0,42 al 0,37 para las aves de corral, y del 0,56 a 0,37 para el resto de especies, siempre en régimen de integración.
La Unión recuerda que el alza de los costes de electricidad o gasóleo repercute directamente en los beneficios percibidos por las explotaciones
De confirmarse, esta decisión respondería a la petición realizada en septiembre pasado por la Unión de Uniones al Subsecretario de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente para que trasladase a las autoridades fiscales la urgente necesidad de realizar una revisión estructural de los índices de rendimiento aplicables a las explotaciones ganaderas en integración.
Junto a la petición, la organización incluía un informe donde se reflejaban cómo la tendencia al alta de los costes de electricidad o gasóleo se mantiene en el tiempo, lo que repercute directamente en los beneficios percibidos por las explotaciones. Al encarecimiento de estos inputs, muy importantes para la ganadería de integración, se ha añadido la aparición por imperativos legales de otros costes, no existentes en el momento de la fijación inicial de los módulos, relacionados con los seguros de retiradas de cadáveres, la gestión de las deyecciones ganaderas y la adaptación a las nuevas normas de bienestar animal y bioseguridad en las explotaciones.
En dicho informe, y a pesar de la falta de datos oficiales, la organización también incluía una evolución de los ingresos recibidos por los ganaderos integrados en los últimos años, con una manifiesta tendencia negativa.
Por otro lado, el sistema de módulos de IRPF, el más adecuado por su mayor simplicidad administrativa para las explotaciones de dimensión económica pequeña o mediana, debe ir adaptando los índices que determinan el rendimiento fiscal a la nueva situación de costes productivos y precios, no sólo en el caso de la ganadería en régimen de integración, sino también para otros sectores.
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