En relación a sus cualidades organolépticas (como su sabor, textura, color y olor) los langostinos capturados en los caladeros de Sanlúcar son estadísticamente diferentes desde un punto de vista sensorial a los de otros caladeros.

    En dichos estudios se han tenido en cuenta las zonas tradicionales de pesca, los equipamientos pesqueros y la actividad de comercialización y distribución, entre otros aspectos relacionados con esta pesquería.

    Tanto el Ayuntamiento sanluqueño como los pescadores de la zona creen que la creación de este distintivos de calidad es uno de los "instrumentos más eficaces para diferenciar los productos locales, revalorizar su producción, y promocionar uno de los mejores productos frescos que se comercializan en su lonja".

    Con ello el consistorio considera que se impulsará el prestigio del sector pesquero sanluqueño uno de los principales motores económicos de la localidad.

    De hecho, el valor de la producción pesquera comercializada por la lonja y el centro de expedición del puerto de Bonanza durante el pasado año alcanzó 15.394.146 euros, lo que equivale a un volumen de descargas de 4.720.933 kilogramos de productos

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