Por ello, se ha prohibido la actividad cinegética y se ha abierto un expediente sancionador en las dos áreas en las que se hallaron los cebos envenenados.
Los animales fallecidos fueron hallados por agentes medioambientales que fueron alertados por la organización no gubernamental Grupo de Rehabilitación de la Fauna Autóctona y su Hábitat (GREFA) de la aparición de un águila perdicera radio-marcada muerta en el término de Medranda, en la provincia de Guadalajara.
En este sentido, la consejera especificó que la Junta ha abierto un expediente sancionador para las dos explotaciones en las que se hallaron los cebos envenenados y que, además, este hecho se ha puesto en conocimiento de la Fiscalía.