EFE.- "La cosecha es indudablemente mayor que el pasado año. Han surtido efecto las medidas adoptadas por el Gobierno para incrementar la superficie de cultivo", aseguró Zubkov, citado por las agencias rusas.
Zubkov aseguró que a día de hoy se han recogido 7,5 millones de toneladas en 1,8 millones de hectáreas de los que se han exportado 770.000 toneladas.
Rusia tiene intención de exportar este año 6,5 millones de toneladas de cereales, 1,5 millones antes de que termine el mes de julio.
"Actualmente, vendemos nuestro grano a 27 países. Tradicionalmente nuestros clientes son Egipto, Turquía e Israel. Al mismo tiempo, han surgido nuevos países europeos. Nuestro grano es de calidad, por eso hay una gran demanda", dijo.
Destacó que los precios se mantienen estables en el mercado de grano tras la decisión del Gobierno de levantar el pasado 1 de julio la prohibición de exportar cereales.
Zubkov considera que la prohibición de exportar permitió "garantizar la demanda interna del país y mantener los precios del grano a un nivel aceptable tanto para los consumidores como para los productores".
La cosecha de grano en Rusia descendió el pasado año un 33 por ciento en comparación con 2009 debido a la peor sequía en varias décadas, según el Ministerio de Agricultura.
Los agricultores rusos recogieron 64,2 millones de toneladas, frente a los 97 millones del pasado año.
El primer ministro ruso, Vladímir Putin, reconoció que el Ejecutivo había tenido que asignar en 2010 una gran cantidad de dinero en ayudas a productores y campesinos, puesto que era la única forma de evitar que se dispararan los precios del pan, la harina y otros productos básicos.