EFE.- "Tratamos sobre la emergencia de la reforma agraria, que está paralizada en su Gobierno, y expusimos que no habrá reforma agraria sin expropiaciones de tierras", declaró tras el encuentro Alexandre Conceição, miembro de la dirección nacional del MST.
El ministro de Desarrollo Agrario, Gilberto José Vargas, dijo por su parte que el Gobierno intentará darle más calidad a la reforma agraria, asentando a los campesinos en tierras que cuenten con los debidos sistemas de riego, y que también ofrecerá más apoyo técnico y planes de formación.
La reunión con Rousseff ocurrió un día después de una protesta realizada por el MST en Brasilia, que tuvo momentos de tensión y en la que se registraron enfrentamientos entre manifestantes y la Policía que dejaron varios heridos, ninguno de ellos de gravedad.
Según Vargas, lo ocurrido durante la manifestación no fue abordado en la conversación que Rousseff tuvo con los líderes del MST, celebrada en el Palacio presidencial de Planalto.
Durante el encuentro, los activistas le entregaron a la jefa de Estado un documento en el que plasmaron sus quejas y propusieron que se adopte un plan de "Reforma Agraria Popular", que es el principal asunto del sexto Congreso Nacional del MST, que comenzó el pasado lunes en Brasilia y concluirá mañana.
El documento, entregado a los periodistas, insiste en que "hay una necesidad urgente de promover cambios en la reforma agraria", a fin de asentar a cerca de 150.000 familias de campesinos acampados en todo el país a la espera de que les sean otorgadas tierras para cultivar.