El Decreto sobre la trazabilidad de las uvas y las aceitunas sin transformar, aprobado el pasado 21 de octubre, ha sido bien acogida por APAG Extremadura ASAJA, aunque considere que hay algunas cuestiones un poco «laxas», en especial porque recoge el 90 por ciento de las alegaciones y peticiones trasladadas por la propia APAG a la Consejería de Medio Ambiente, Rural, Políticas Agrarias y Territorio de la Junta extremeña.
Así lo ha reflejado este lunes 24 en rueda de prensa el presidente de esta organización agraria, Juan Metidieri, tras un exhaustivo estudio de la norma con la que se controlará los robos en el campo extremeño y garantizar la seguridad alimentaria.
ven que la norma es un poco laxa en el control de los puestos de compra en las exigencias documentales
Metidieri ha subrayado la «sencillez y claridad» de este documento de trazabilidad que, en su opinión, va a ser práctico y positivo para los agricultores dedicados a la uva y aceituna, producciones donde se concentra, sobre todo, el problema de robos en explotaciones agrarias de nuestra comunidad autónoma.
Este documento da luz verde a importantes requisitos, si bien considera que la norma es un poco laxa en el control de los puestos de compra en las exigencias documentales. En este sentido, ha matizado que el anteproyecto era mucho más exigente a la hora de solicitar más requisitos para poder crear u ostentar la titularidad de uno de estos puestos.
Entre los puntos a los que ha hecho referencia el presidente de esta organización destaca que dicha normativa solo va a ser aplicable a la uva y aceituna, cuando en un principio iba a abarcar cualquier producto agrario.
celebran que el Decreto fije una carga mínima de uva y aceituna para tener que cumplir los requisitos establecidos
Asimismo, ha puesto el acento en que el Decreto de trazabilidad publicado fija una carga mínima de uva y aceituna para tener que cumplir los requisitos que establece en su articulado. En concreto, ese límite son 25 kilos,de tal forma que si una persona transporta más de esa cantidad de aceitunas y uvas sin transformar desde la explotación agrícola hasta el primer establecimiento, deberá cumplir al dictado esta normativa si quiere evitar las sanciones económicas estipuladas en la Ley 17/2011 de Seguridad Alimentaria.
Sobre este punto, ha hecho referencia a las sanciones para quienes no cumplan las obligaciones de esta nueva norma –operadores y/o transportistas, que ascenderán de los 20.000 a los 600.000 euros.
De igual manera, ha resaltado la importancia que supone el establecimiento de fechas de finalización de las campañas de uva ( 15 de octubre) y para la aceituna (1 de marzo).
Por último, el presidente de APAG Extrmadura ASAJA ha recalcado la coordinación y colaboración solicitada desde el nuevo Decreto para que todos los agentes implicados (ayuntamientos, organizaciones y cooperativas agrarias, guarderías rurales y la propia Delegación de Gobierno en Extremadura) para luchar contra los robos.