Coincidiendo con el Día Nacional de la Nutrición, la Asociación Alcachofa de España recomienda consumir alcachofa al menos tres veces a la semana para ayudar a combatir enfermedades que actualmente atacan a miles de personas en España como la diabetes o el cáncer de colon y accidentes cerebrovasculares como el trombo, gracias a su elevado contenido en nutrientes beneficiosos para nuestra salud.

En los últimos años asociaciones de promoción de los buenos hábitos de vida y nutricionistas están haciendo hincapié en el consumo de verduras reconocidas por el apoyo que suponen para la salud como el alcaucil. Esta hortaliza ayuda a proteger nuestro organismo frente al ataque de enfermedades como el cáncer de colon, el tumor maligno de mayor incidencia en nuestro país, con más de 41.000 nuevos casos al año. De hecho, según la Asociación Española Contra el Cáncer, afectará a uno de cada 20 hombres y a una de cada 30 mujeres antes de cumplir los 74 años.

Según un estudio del Consejo General de Dietistas y Nutricionistas de España (CGDNE), la alcachofa contribuye a esta lucha a través de la inulina de cadena muy larga (VLCI) que se extrae de ella y que tiene beneficios pronunciados en la composición de la microbiota fecal humana (conjunto de microorganismos localizados en las heces).

Por su parte, esta verdura también ayuda a frenar la diabetes, gracias a su aporte de inulina, un polisacárido que se metaboliza en el organismo y que crea unidades de fructosa en lugar de glucosa. Esto significa que supone un refuerzo para estabilizar los niveles de azúcar en la sangre y reducir los de colesterol, disminuyendo el riesgo de ataques cardíacos y mejorando la circulación. Además, el contenido en fibra de la alcachofa supone un apoyo a esta sustancia, ya que ralentiza la absorción de glucosa, lo que evita elevaciones bruscas de la glucemia.

Una verdura contra las enfermedades cardiovasculares

Estudios recientes indican que los extractos de alcachofa pueden tener un potencial terapéutico para la enfermedad cardiovascular debido a su alto contenido en antioxidantes, demostrado en las células endoteliales y leucocitos, según indica Andrea Ferrandis, nutricionista y cofundadora de Sanus Vitae. Otras investigaciones han sugerido su elevado aporte de luteolina, que protege a las lipoproteínas de baja densidad (LDL) de la oxidación in vitro.

Ferrandis también destaca estudios que subrayan la importancia de estos extractos vegetales de cara a sufrir hipertensión y trombos. “Uno de sus componentes, la cinarina, produce una mayor cantidad de óxido nítrico (NO) por parte de las células endoteliales. Este, a su vez, puede difundir a la sangre provocando una inhibición de la agregación plaquetaria, lo que causa una acción antihipertensiva y antitrombótica”, explica la nutricionista.

Los especialistas en nutrición recomiendan incluir el consumo de alcachofa en una dieta variada, equilibrada y adaptada a cada necesidad, que recoja verduras, frutas, legumbres, aceite de oliva, frutos secos crudos y alimentos integrales. “Estos productos complementan el efecto cardioprotector que se le confiere al alcaucil, sin olvidarnos de que realizar actividad física diaria también es imprescindible”, concluye Ferrandis.