En el documento extremeño que se entregó en Bruselas, se recoge la posición de Extremadura respecto a la convergencia del pago base y en relación a los pagos asociados. Sobre el primer aspecto, las observaciones extremeñas dejan claro que si en el año 2019 todos los perceptores reciben el mismo importe por cada derecho de pago de base, no se reconocerá la diferenciación del potencial productivo de los territorios.
En este sentido, el consejero transmitió a Häusler la diversidad de producciones existentes en Extremadura, por lo que la aplicación del concepto de convergencia pone en peligro la existencia de algunos cultivos muy importantes para la región como el tomate, el arroz y el tabaco. Por este motivo, el Gobierno extremeño “no puede estar de acuerdo con un modelo que va a ocasionar la desaparición de cultivos y el abandono de ciertas zonas productivas eminentemente agrícolas”, señala el documento entregado por el titular extremeño de Agricultura.
Por ello, el Ejecutivo regional, en defensa de estos productores, considera “imprescindible” establecer un límite máximo en la pérdida del valor del derecho de pago base. “Siendo nuestra Comunidad Autónoma región de convergencia, entendemos que con este diseño del pago base se contribuirá al deterioro de nuestros indicadores económicos y sociales”, sentencia el texto entregado en Bruselas.
Por otro lado, en relación a los pagos asociados, la posición de Extremadura es clara: “No debe existir ninguna relación concreta y lineal para todos los Estados Miembros, sino que son éstos los que, dentro de su territorio, deben indicar qué producciones serán las susceptibles de recibir el pago acoplado”.
Éstas son las consideraciones transmitidas por el consejero al jefe de gabinete de Ciolos, en las que se deja constancia de que Extremadura está compuesta por un mosaico de aprovechamientos y cultivos, que van a verse tratados de la misma forma en el sistema propuesto. El documento recalca que la permanencia de algunos de estos cultivos “va a verse gravemente amenazada si realmente la propuesta es aceptada tal y como la conocemos”.
Al margen de este asunto el consejero se ha mostrado confiado en que el nuevo marco financiero para el período 2014-2020, aunque desciende por primera vez permitirá a la agricultura mantener ayudas similares a las que percibe ahora.
Respecto al número de hectáreas que en España recibirán las ayudas comunitarias, ha apuntado que podrían ser 22 millones, como en la actualidad. Si, como se ha planteado en Bruselas, se tomara como referencia el número de 38 millones de hectáreas, ha dicho, sería muy perjudicial, porque lógicamente habría que repartir más el dinero.
Todo ello supone una serie de “batallas” que Extremadura debe afrontar en el marco de la reforma de la PAC y en las que el Gobierno regional seguirá defendiendo los intereses de los agricultores y ganaderos de la Comunidad Autónoma.