APAG Extremadura ASAJA insta a la Junta de Extremadura a que de forma inmediata ponga en marcha soluciones «a la agónica situación por la que año tras año atraviesan el cereal extremeño». Soluciones que podría pasar por ventajas fiscales, un seguro por pérdidas de renta en las explotaciones, así como rebajass en las cuotas de la Seguridad Social y el IBI rústico
Han pasado más de cinco meses desde que se convocara la Mesa del Cereal. Cinco meses en los que lo único que ha hecho la Consejería de Medio Ambiente, Rural, Políticas Agrarias y Territorio «ha sido mirar hacia otro lado y obviar la grave circunstancia por la que se encuentra el sector del cereal en nuestra región».
A pesar del Plan de viabilidad que esta organización agraria presentó en el Consejo Asesor Agrario de Extremadura (CAEX) del pasado 30 de septiembre, la Junta sigue guardando silencio, mientras que la coyuntura en la que se encuentra el cereal extremeño sigue empeorando.
APAG EXTREMADURA ASAJA lamenta que el sector del cereal extremeño «esté abandonado a su suerte»
Por este motivo, el presidente de APAG Extremadura ASAJA, Juan Metidieri, ha solicitado este lunes en rueda de prensa la inmediata puesta en marcha de soluciones «para que el sector cereal extremeño, abandonado a su suerte, cuente con medidas para mejorar tanto su política fitosanitaria, como la implementación de ventajas fiscales, ante la precariedad de precios en cultivos como el trigo (a 0,17 céntimos/kilogramo) la cebada (a 0,1650 céntimos/ kilogramo) o la avena (a 0,1555 céntimos / kilogramo)».
Así, ha pedido tanto a la Junta como al Gobierno central medidas como un seguro por pérdidas de renta en las explotaciones, así como exenciones en las cuotas de la Seguridad Social y el IBI rústico.
Metidieri ha solicitado igualmente la apertura de líneas de financiación para dar liquidez a las explotaciones, al 0% de interés, además de ayudas a minimis hasta los 12.000 euros, sin olvidar la modificación del PDR, creando una agroambiental para los cereales.
Cabe destacar que en la actualidad Extremadura tiene más de 200.000 hectáreas de cereal de invierno, que generan un gasto de unos 76 millones de euros.