El juez de instrucción número 4 de Lleida ha dictado prisión provisional sin fianza para el cazador que mató a dos agentes rurales en Aspa. Lo acusa de dos delitos de asesinato u homicidio (lo acabará de determinar a medida que avance la investigación), atentado a la autoridad y tenencia ilícita de armas.
La abogada del cazador Ismael Rodriguez se ha opuesto a la prisión y ha pedido la libertad, pero su petición no ha prosperado. El acusado, que ya se esperaba la resolución judicial, se ha mostrado abatido en todo momento y arrepentido por los hechos. Tanto buen punto se ha conocido la resolución judicial, los Mossos lo han llevado a la prisión de Ponent, en Lleida. «Está hundido. Se lo veía a venir», ha explicado su abogada, Montserrat Torres y recoge Gemma Liñán en elnacional.cat.
La declaración se ha hecho en dos partes. El interrogatorio en los juzgados y la reconstrucción de los hechos, donde el acusado no ha aportado ningún nuevo dato ni ha recordado nada más diferente a lo que ya ha declarado desde un primer momento.
«Buen día, somos del SEPRONA descargue el arma». Así se presentaron los dos agentes rurales delante de el cazador según ha relatado él mismo al juez esta mañana. «En aquel momento Ismael se giró ninguno los dos agentes con el arma cargada y disparó contra ellos a una distancia muy próxima», explica el juez en su auto.
El cazador ha mantenido estae martes 24 que los disparó desde una distancia entre 10 y 15 metros, pero según el juez, el informe pericial matiza qué «las heridas en los Agentes parece indicar que podría ser una distancia menor».
Se mantienen las dudas sobre cuántos disparos hizo; el insiste en que tres; otras fuentes señalan que cuatro
El juez se cree la versión del investigar que no hubo discusión ni requerimiento por parte de los agentes, más allá que descargara el arma. Así, dice que se desprende de su declaración de los hechos, y tilda de «inexplicable» la reacción del cazador, y más cuándo no habido ninguna situación de tensión o enfrentamiento previo.
El juez también destaca que a lo largo de los más de 10 años de cazador de Ismael Rodriguez ha coincidido al menos 3 veces con Agentes Rurales, por lo que sabía que este cuerpo no lleva ningún tipo de arma.
El investigado ha explicado que después de disparar corrió hasta donde tenía el coche. Allí encontró a un compañero, le explicó que había matado a dos agentes rurales y esperaron que llegaran el resto de cazadores. Media hora más tarde llamó al 112 desde el lugar donde los Agentes Rurales tenían aparcado su vehículo y ninguno de los cazadores se acercó donde estaban los cuerpos.
Ismael Rodríguez mantiene que disparó tres tiros. Los que permite el arma hacer seguidos sin estar manipulada. Pero el informe forense describe cuatro, dos en cada uno de los Agentes Rurales.
Una de las víctimas tiene un tiro en la cara y el otro en el cuello. El otro Agente tiene heridas por tiros en el tórax y la zona parietal.
El juez está a la espera del análisis del arma para concluir si estaba manipulada o no. En caso de que no lo hubiera sido, quiere decir, que Ismael Rodriguez hizo los tiros sacados y después volvió a cargar el arma y disparó el cuarto.
La abogada defensora insiste en que está arrepentido, pide perdón y no entiende qué paso»
«Está arrepentido, pide perdón, no lo entiende y está muy afectado». Así ha resumido su abogada la declaración, corta, que ha hecho a los juzgados, justo antes de marcharse hacia Aspa a hacer la reconstrucción de los hechos. El cazador mantiene la confesión del crimen y que no recuerda cómo pudo suceder. Su abogada confiaba esta mañana antes de entrar al interrogatorio en que cuando lo llevaran a Aspa, en el lugar donde pasaron los hechos, recordara porque disparó a los dos agentes rurales, a poco más de dos metros de la cabeza y les dio tiempo de reacción.
La abogada mantiene que asesinó a los dos agentes rurales por «un movimiento reflejo, un acto mecánico. No sabemos qué le pasó».
Parece que la estrategia de la defensa pasa por mostrar el arrepentimiento, mantener la confesión, colaborar con la justicia y exponer la falta de intencionalidad. «Fue él quien hizo la llamada al 112 y está colaborando en todo momento», reitera Montse Torres, que lleva la defensa del cazador.
En los juzgados lo esperaban sus padres y su hermano. No lo habían visto todavía desde los hechos del sábado. Pacientes, se han sentado en el pasillo que lleva al juzgado de Instrucción número 4 que instruye el caso y donde ha declarado. Ismael Gutiérrez Rodríguez ha podido estar unos minutos con su familia, antes de marcharse hacia Aspa a hacer la reconstrucción de los hechos.